Domenech critica a sus propios jugadores

El entrenador de Francia Raymond Domenech dijo que sus jugadores se comportaron como "imbéciles" al protagonizar un boicot por la expulsión de Nicolas Anelka del equipo. Domenech afirmó el lunes que no pudo evitar que los jugadores se declararan en huelga el domingo, diciendo que trató de convencerlos de que lo que estaban haciendo "era una aberración, una imbecilidad, una estupidez sin nombre". Francia se enfrenta a Sudáfrica el martes por el Grupo A y necesita ganar para conservar alguna posibilidad de avanzar a la próxima ronda del Mundial. Domenech dijo que "todavía no he escogido al equipo, veremos mañana". Un damnificado podría ser Patrice Evra, cuya capitanía podría acabar tras cinco partidos. Domenech declinó confirmarle luego que el defensor instigó la protesta el domingo. Evra reaccionó furioso tras la decisión tomada por la Federación Francesa de Fútbol de expulsar el sábado a Anelka, en medio de los reclamos de los jugadores de que la FFF le negó al delantero la oportunidad de comparecer ante la prensa para formular un descargo. Luego de inicialmente decir que entendía la frustración de los jugadores y lo que dijo Anelka, si bien pasado de tono, por ser algo que debe quedarse en el vestuario, Domenech dio un giro de 180 grados el lunes. "Antes que nada, quisiera especificar que el castigo de Nicolas Anelka está justificado", dijo Domenech. "Apoyo a lo federación en este asunto. A nadie se le puede permitir actuar de esa forma, ya sea en el vestuario o fuera". Al día siguiente del exabrupto durante el descanso de la derrota 2-0 ante México el jueves, Anelka se entrenó normalmente con el equipo. Fue expulsado la noche siguiente por la FFA luego que el deportivo L"Equipe publicó los detalles en su portada. Con rostro serio, Domenech también defendió su decisión de leer el comunicado de los jugadores rehusándose a entrenar. Muchos quedaron sorprendidos de que Domenech aceptó hablar en nombre de los jugadores, pues daba a entender que apoyaba la protesta. Domenech mencionó que intentó durante 45 minutos evitar la protesta.