Granada vuelve a ganar y cree en la salvación
Dos victorias seguidas dan esperanzas a los granotas
Quique Pina lo tenía claro cuando contrató a José Ramón Sandoval hace apenas díez días. El Granada acababa de perder en Los Cármenes frente al Espanyol, pero en las cuentas del mandatario la salvación era posible -"segura", en sus palabras-. Dos partidos más tarde, el Granada está fuera de la zona de descenso a la espera del resto de resultados de la jornada.
El equipo rojiblanco encadenó su segunda victoria consecutiva -primera vez que sucede esta temporada- frente a un Córdoba que entregó el partido con varios errores individuales impropios de la élite del fútbol español. Mainz, al borde del descanso, y El Arabi, de penalti en el segundo acto, finiquitaron un encuentro marcado por la expulsión de Íñigo López al filo de la media hora.
Los rojiblancos, eso sí, tendrá que sumar todavía algún punto más ante Real Sociedad y Atlético. Y en ninguno de esos dos partidos, probablemente en ninguno más en la élite, va a tener tantas facilidades como las que dio este sábado el Córdoba. Algunos futbolistas del cuadro de José Antonio Romero dejaron una paupérrima imagen individual en Los Cármenes, impropia de jugadores de Primera División.
El partido se rompió con la roja a Íñigo López tras dos entradas desmedidas del veterano y veloz central riojano. La primera, cuando Rochina le encaraba frontalmente y no tenía ninguna necesidad de ir al suelo de forma tan brusca. La segunda, tras perder una carrera con El Arabi y lanzarse a la desesperada ante un futbolista que iba del centro hacia la banda, sin ningún peligro.
Ya con uno más, el Granada se hizo dueño definitivo del partido y generó varias situaciones de peligro antes del gol. Un cabezazo de Babin que se estrelló en el poste, dos llegadas de Lass y Nyom por banda y disparo raso de Rubén Pérez fueron el preludio del gol. Una falta lateral que Mainz, que esperaba libre de marca el centro de Piti, cabeceó a la red.
El segundo acto siguió el mismo guión del primero. Los Cármenes se impacientaba con su equipo cuando un clamoroso penalti de Pantic sobre Rochina -el mejor del encuentro- finiquitó el choque. El Arabi hizo el segundo. Los plazos de Pina se siguen cumpliendo.