Un Messi descomunal conduce al Barcelona
Goleada al Depor en Riazor y siguen en la lucha por el título
El '10' del Barça pasó como un huracán por Riazor, sentenciando a su rival con dos goles en la primera media hora de juego y otro más en la reanudación. Al igual que ocurrió la semana pasada ante el Atlético, el argentino fue el alma de un equipo que -gracias en buena medida a su estrella-, mantiene el pulso con el Real Madrid en cabeza de la Liga. Los de Ancelotti tampoco fallaron en su visita Getafe (0-3), así que las cosas siguen igual que hace siete días: con el Barça un punto por debajo de los blancos, y un partido más.
El Barça confirmó su mejoría tras una 'semana fantástica', en la que ha recuperado las buenas sensaciones con sus convincentes triunfos frente al Atlético (3-1), Elche en la Copa (0-4) y Deportivo (0-4). Tres resultados que sirven para dejar atrás las turbulencias desatadas a principios de mes con el batacazo en Anoeta. Los goles de Messi han acallado el debate sobre sus supuestas tensiones con Luis Enrique, la destitución de Zubizarreta y la marcha de Puyol del club.
Por primera vez desde que llegó al banquillo, el técnico azulgrana repitió alineación. Y el Barça lució de nuevo su mejor cara, rescatando la fluidez e intensidad que hasta hace bien poco parecían perdidas. Volvieron muchas de sus señas de identidad, como la solidez y fortaleza defensiva, especialmente en la presión para recuperar el balón. El bloque funcionó y su estrella marca las diferencias.
Messi apenas necesitó diez minutos para decantar la balanza. El 0-1 llegó de cabeza, al rematar desde el punto de penalti un centro medido de Rakitic. El croata le puso el gol en bandeja con un pase al más puro 'estilo Schuster' o Ronald Koeman.
El 0-2 no se hizo esperar demasiado. A la media hora, el '10' batió a Fabricio con un suave remate picado, elevando el balón sutilmente ante la salida del meta local, después de una combinación de Neymar con Suárez.
El Barça dominaba a placer, monopolizando prácticamente el balón, aunque el Deportivo estuvo a punto de dar un buen susto justo un minuto después por mediación de un ex azulgrana: Isaac Cuenca. El canterano, sin embargo, falló cuando lo tenía todo a su favor para batir a Bravo.
Pero Messi, protagonista indiscutible, no tenía suficiente. En el 35' estuvo a punto de marcar el tercero con un derechazo dentro del área que salió alto por muy poco. El '10' fue el mejor del 'tridente'. Luis Suárez, luchador, estuvo en cambio negado de cara a portería. El uruguayo falló un gol cantado en el 22', después de que Iniesta lo dejara solo ante Fabricio; y en el 38' y el 89' se repitió la historia. Su entrega y sacrificio en la presión no se vieron recompensados con goles. Neymar, algo apagado, dejó algunos destellos con sus quiebros eléctricos.
El Barça soltó un poco el pie del acelerador tras el descanso, y el Depor estuvo a punto de aprovecharlo en el 56', cuando Bravo evitó el 1-2 en un chut a bocajarro de Juan Domínguez.
Por si acaso, Messi zanjó rápido las dudas culminando su 'hat-trick'. El 0-3 llegó tras un potente chut suyo en el área, ante la pasividad de la zaga gallega.
El 0-4 definitivo fue un cúmulo de despropósitos por parte de la defensa local. Alves centró desde la derecha, y Sidnei introdujo el balón en su propia portería tras un mal rechace de Lopo, en el 82'. Una jugada cómica que puso punto y final a un partido plácido para el Barça.