Gobierno brasileño vuelve a bajar meta de ahorro fiscal por freno de economía
El gobierno de Brasil anunció el miércoles una reducción de la meta de superávit fiscal primario para 2015 a 0,15% del PIB, desde un previo 1,1%, debido a un agudo freno de la actividad en la séptima economía global.
"El proyecto de ley enviado (al Congreso) fija la meta de superávit primario del sector público no financiero consolidado para 2015 en 8.747 millones de reales (unos 2.713 millones de dólares), equivalente al 0,15% del PIB", señaló el ministerio de Planificación en un comunicado.
El encargado de esa cartera, Nelson Barbosa, dijo en una rueda de prensa conjunta con su par de Hacienda, Joaquim Levy, que la aguda caída de la recaudación impositiva hizo inviable alcanzar el objetivo planteado originalmente.
Brasil recorre su quinto año de crecimiento económico magro o nulo y se espera una contracción del Producto Interno Bruto (PIB) en torno a 1,7% en 2015, de acuerdo a proyecciones de analistas. El gobierno, de su lado, espera una contracción de 1,49% del PIB para este año, según una cifra revisada a la baja también este miércoles desde un anterior 1,2%.
El deterioro de las cuentas públicas y las dificultades para estimular la actividad sembraron de incertidumbre las expectativas y le han cobrado un precio alto a la popularidad de la presidenta Dilma Rousseff, que se derrumbó a un dígito. La crisis económica es el problema más grave que tiene Brasil, según un sondeo publicado esta semana.
"Es un fenómeno transitorio (...) el rumbo está muy claro, solo estamos ajustando un poco las velas", dijo Levy.
Ajuste
Con esta reducción, el gobierno busca que el Congreso le apruebe la sexta reducción consecutiva de la meta de ahorro primario -previa al pago de los intereses de la deuda- desde 2014. En el año en curso, la primera estimación de 1,2% fue modificada en mayo a 1,1% cuando se anunció un recorte presupuestario de 23.300 millones de dólares.
Ese fue el mayor recorte fiscal realizado por los gobiernos izquierdistas del Partido de los Trabajadores (PT), en el poder desde 2003.
"Debemos pedir un ajuste para la meta de resultado primario en vista del desempeño de la recaudación que observamos hasta ahora", señaló Levy, un economista de perfil ortodoxo responsable de estructurar un paquete de medidas de ajuste fiscal -que el gobierno promovió además del recorte presupuestario- que generó resistencias en el Congreso.
En los últimos 12 meses hasta mayo, último dato oficial, el déficit primario de las cuentas públicas ascendía a 38.500 millones de reales, equivalente a 0,68% del PIB.
Además de recortar la meta, el gobierno anunció el miércoles un nuevo recorte de gastos de unos 2.700 millones de dólares en el presupuesto.
Los mercados reaccionaron con mal humor al anuncio del gobierno. La Bolsa de Sao Paulo cayó 1,08% a 50.915 puntos mientras que el real perdió 1,55% para cotizarse en 3,22 unidades por dólar. "El mercado naturalmente reacciona de manera negativa. El reajuste (de la meta fiscal) debilita al gobierno", comentó el analista Alex Agostini, de la calificadora Austin Rating, a la televisora Globo.
Más temprano, la presidenta Dilma Rousseff había anticipado la propuesta de su equipo al parlamento: "Estamos buscando el reequilibrio de las cuentas públicas, que es una parte esencial para que la economía se recupere", declaró durante un acto en el estado de Sao Paulo.
La meta para 2016 fue fijada en 0,7% del PIB desde el anterior 2%.