Pancho se marchó y el embargo en Cuba se quedó

Santiago, Cuba/Se fue el papa de Cuba y se acabó la bulla, los cierres de calle y el estrés con la seguridad. Los cubanos vuelven a la normalidad y salen de la escena noticiosa.

La visita de Francisco, empezó llena de expectativas. Todos esperaban, aunque no lo dijeran abiertamente, que denunciará directamente y sin contemplación el embargo económico al que tiene sometido Estados Unidos desde que triunfo la revolución, liderada por Fidel Castro.

Sin embargo, la denuncia nunca llegó, pero el cubano está atento a lo que pueda decir el papa en Estados Unidos. Ellos aseguran, en sus conversaciones de "paladares" [un término utilizado en la isla para referirse a los restaurantes], que ante los americanos Francisco va a hablar del embargo.

Por las calles de Cuba, se nota y se puede sentir el sufrimiento de su gente, pero a pesar que para el cubano las cosas no son tan fáciles como para el resto de los americanos, se mantienen optimistas que vendrán tiempos mejores.

Defienden y están altamente convencidos que la seguridad, la salud y la educación, son cosas que en Cuba son envidiables.

En una conversación con un cubano a bordo de un taxi, le preguntaba que pensaba del embargo y me respondió: "Que algo muy malo para el país".

Luego de estar menos de una semana en la isla comunista y compartir con su gente, disfrutar de su belleza y vivir sus dificultades en temas con el internet y el transporte, me hago una reflexión: ¿Que sería de Cuba sin el embargo? ¿Estaría tan atrasada como lo está hoy día?.

Acaso quienes viven de ideologías políticas no se ponen a pensar que el embargo no es un castigo para el socialismo. Es en realidad un crimen de lesa humanidad para su gente que ha tenido que soportarlo por más de 50 años.

El papa Francisco ha hablado de "esperanza" a los cubanos. Espero que esa esperanza se convierta en realidad y algún día podamos ver a una Cuba crecer y avanzar en el mundo sin el embargo, y unida para que todos quieran estar en su país y gozar de las maravillas que ofrece esta isla grande del caribe americano.

Pancho se marchó y aquellos jóvenes quienes pedían al papa internet para su casa, aún no lo tienen y siguen parados en la misma esquina.

Tengo la esperanza que vengan mejores días para la hermosa tierra de Cuba y su gente.