Miles asisten al funeral del presidente de Zambia

Lusaka, Zambia— El ataúd del presidente Michael Sata, envuelto con la bandera de Zambia, fue colocado hoy martes sobre una alfombra roja en el funeral del jefe de estado en un estadio al que asistieron más de 50.000 dolientes y varios líderes africanos.

Sata, de 77 años, fue presidente de esta nación del sur de África desde 2011. Falleció en un hospital de Londres el 28 de octubre después de una larga enfermedad.

El funeral de Sata fue realizado en un estadio en la capital del país, Lusaka, el cual se llenó y cientos de personas más permanecieron afuera. El funeral fue transmitido en vivo en la televisión pública de Zambia y se colocaron varias pantallas gigantes en diversas partes de la nación para que el público lo observara.

Muchos de los dolientes tenían lágrimas en los ojos mientras la viuda de Sata y su hijo lo honraban. Christine Kaseba-Sata describió a su esposo como su "héroe caído", mientras que el hijo de Sata, Mulenga Sata —que también funge como alcalde de Lusaka_, dijo "él no sólo fue mi padre, sino también mi padre político".

El presidente de Zimbabue Robert Mugabe y el mandatario keniano Uhuru Kenyatta asistieron a la ceremonia, junto con los jefes de Estado de Namibia y Madagascar, así como los vicepresidentes de Sudáfrica, Tanzania y Suazilandia. El líder independentista de Zambia y primer presidente, Kenneth Kaunda, también acudió al funeral.

"Estamos orgullosos de habernos relacionado con este gigante africano", dijo Mugabe, quien ha estado en el poder en la vecina Zimbabue durante más de 30 años.

Según la Constitución del país, Zambia debe elegir un nuevo presidente en un plazo de 90 días tras la muerte de Sata. El vicepresidente Guy Scott es el mandatario interino, pero no se puede convertir en presidente porque sus padres no eran zambianos ni de ascendencia zambiana.

No se ha establecido aún la fecha para la elección presidencial. Se espera que el gobernante partido Frente Patriótico anuncie su candidato esta semana.

La semana pasada estallaron disturbios cuando Scott despidió al ministro de Defensa y al secretario general del partido Edgar Lungu en un intento por desactivar las tensiones políticas en torno a la sucesión presidencial. Los disturbios pararon cuando Lungu fue reinstalado.

"El Frente Patriótico no está en venta al mejor postor", dijo Lungu en el funeral, al tiempo que agregó que Sata nunca será olvidado.