La zona africana de libre cambio entra en su 'fase operacional'
Niamey/La zona de libre cambio africana conocida como AfCFTA, por sus siglas en inglés, entró hoy en su "fase operacional" durante la 12 cumbre extraordinaria de la Unión Africana celebrada en Niamey y dedicada precisamente a esta cuestión.
Hoy se celebraba la jornada central de esta cumbre con presencia de los jefes de Estado y gobierno del continente, y fue durante esta sesión que los mandatarios de Nigeria -la mayor economía continental-, Benín, Gabón y Guinea Ecuatorial ratificaron su firma, entre los aplausos de los asistentes.
La cumbre designó además a Ghana como el país que será sede del secretariado permanente de esta zona de libre cambio, y estableció además las normativas sobre reglas de origen, tarifas, eliminación de barreras no tarifarias y sistemas de pago digital, entre otros detalles.
En realidad, la AfCFTA fue creada el 21 de marzo de 2018 en una cumbre en Kigali, y en menos de un año 54 países africanos (la práctica totalidad) la firmaron, pero faltaba que cada país ratificase posteriormente su firma, y en la cumbre de hoy en Niamey se consiguió la cifra de 27.
Con este nuevo instrumento, el continente africano se convierte así en el mayor espacio de intercambio comercial del mundo: sus 1.270 millones de habitantes actuales van a ser 1.700 millones en 2030, y entre ellos estará el 26% de la población mundial en edad de trabajar, destacó hoy en Niamey el presidente de la Comisión de la UA, Moussa Faki Mahamat.
Mahamat se congratuló de que con la AfCFTA "un viejo sueño se hace realidad", un sueño que él dató de la creación misma de la Organización de la Unión Africana (OUA, antecesora de la UA), pero no cayó tampoco en el triunfalismo gratuito.
Por un lado, destacó que esta nueva zona comercial constituye una respuesta a una juventud africana arrastrada por todo tipo de lo que llamó "tentaciones" como el éxodo rural, la emigración, los tráficos ilícitos y la criminalidad transfronteriza.
Pero Mahamat también dijo que el libre comercio por sí solo no significa apertura de fronteras, y por ello insistió en que los países de la UA deben ratificar además el "protocolo de libre circulación" de personas; al respecto, lamentó que numerosos países de la UA pongan mayores trabas en sus movimientos a los ciudadanos africanos que a los demás extranjeros.
Otro aspecto que Mahamat quiso poner de relieve es el hecho de que para algunos países del continente hay actualmente prioridades distintas a las del comercio, como la paz y la seguridad: así, dijo que los países del Sahel consagran un tercio de su presupuesto a la seguridad en detrimento de sectores sociales.
Estaba previsto que los mandatarios africanos tratasen también la cuestión de Sudán, país suspendido de la organización panafricana desde principios de junio, cuando las fuerzas armadas que gobiernan ahora el país reprimieron violentamente una manifestación estudiantil, causando decenas de muertos.
Aunque parecía que esta cumbre era la ocasión perfecta para el retorno de Sudán a la UA una vez que el poder y los manifestantes hayan llegado a un acuerdo, esta cuestión y otras han sido pospuestas hasta mañana, último día de la cumbre.
Del mismo modo, tampoco hoy se trataron oficialmente la situación en los países más inestables del continente, como Argelia, Libia, Mali o Etiopía.