Plataforma opositora cubana se repone tras salida a España de su líder
La Habana, Cuba/La plataforma opositora cubana Archipiélago reaccionó finalmente este martes a la salida de su fundador, Yunior García, hacia España, en medio de la frustrada jornada cívica y afirmó que a partir de ahora tendrá una directiva "horizontal y democrática".
Archipiélago, un grupo opositor de debate político en la red Facebook, será de aquí en más "una plataforma de acción ciudadana que busca impulsar un nuevo pacto social" afirmó un comunicado en su cuenta de Twitter, y que "se coordina de manera horizontal y democrática", es decir, sin líderes.
La agrupación, con más de 38.000 miembros reconocidos dentro y fuera de Cuba, recibió un duro golpe cuando el pasado miércoles se supo de la llegada del dramaturgo García a Madrid junto con su esposa, en momentos en que sus compañeros denunciaban que estaba ilocalizable y reclamaban por ello al gobierno.
Archipiélago había convocado a una manifestación en siete provincias del país el 15 de noviembre, que primero fue prohibida por las autoridades y luego se impidió por un fuerte control policial y el bloqueo de muchos activistas en sus casas. García, que había anunciado una marcha solitaria el 14, también fue impedido de salir por las autoridades.
"Hemos entendido la Jornada Cívica como un hecho a partir del cual lo aprendido ha devenido fortaleza", dice el grupo, que se propone contribuir a la liberación de los presos políticos, la conquista de los derechos fundamentales de la ciudadanía "por vías no violentas".
También fortalecer "diálogos y consensos de la sociedad civil" y promover "consultas populares", entre otras.
En su nuevo ciclo, dice pretende impulsar "un modelo de República que integre los anhelos de todo el pueblo cubano", acogiendo "diferentes ideologías, sin definir un proyecto político propio".
Sus objetivos son "el empoderamiento ciudadano, la reconstrucción del tejido social" y el establecimiento de "una sociedad democrática".
Archipiélago surgió tras las históricas manifestaciones que estallaron el 11 de julio, al grito de "Tenemos hambre" y "Libertad", que dejaron un muerto, varios heridos, 1.270 detenidos, de los cuales 658 siguen en prisión, según la ONG de derechos humanos Cubalex.
La plataforma está formada básicamente por jóvenes opositores y mantuvo hasta ahora una relación distante con la disidencia tradicional de la isla caribeña.
El gobierno considera que sus opositores son mercenarios al servicios de Estados Unidos.