Catar recurre a Rusia para romper bloqueo y defiende relaciones con Irán
Catar recurrió hoy a Rusia para romper el aislamiento diplomático y el bloqueo al que es sometido por varios países del Golfo Pérsico, encabezados por Arabia Saudí, y defendió sus buenas relaciones con Irán.
"Todas las diferencias deben solucionarse por medio del diálogo y el formato del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo es el mejor formato para ello", dijo Mohamed bin Abdelrahman al Zani, el ministro de Exteriores catarí, al reunirse con su colega ruso, Serguéi Lavrov.
Al Zani aseguró que el objetivo de su visita a Moscú era informar a los dirigentes rusos sobre "las medidas ilegales" adoptadas contra el emirato por su supuesto apoyo y financiación a grupos radicales, rebeldes y organizaciones terroristas en Siria, Libia o el Yemen.
Recordó las relaciones de amistad que unen a ambos países y el importante papel que el Kremlin tiene en los asuntos internacionales.
"Quiero agradecer a las instituciones rusas que nos ofrecieran su ayuda para paliar las medidas ilegales que fueron adoptadas contra nosotros", subrayó, en alusión a la asistencia de Moscú para superar el embargo y el bloqueo por aire, tierra y mar a la península.
Precisamente, las relaciones entre Rusia y Catar mejoraron considerablemente con la llegada al poder en 2013 del actual emir de Catar, el jeque Tamim bin Hamad al Zani, que hizo olvidar las tensiones entre su padre y el Kremlin, aunque ambos apoyan ahora a bandos enfrentados en Siria.
De hecho, el Fondo Soberano de Catar participó en diciembre del pasado año en la privatización de la mayor petrolera de Rusia, Rosneft.
A su vez, el jefe de la diplomacia catarí aseguró en declaraciones al canal de televisión rusa en árabe RT que "todos quieren unas relaciones positivas con Irán, que es nuestro vecino".
"Existen algunas discrepancias y temores por parte de todos los países del Consejo, pero la opción estratégica de todos los países fue entablar un diálogo con Irán. Y nosotros apoyamos esos esfuerzos", explicó.
Además, en alusión a la situación en torno al canal de televisión catarí Al Yazira, cuya cobertura ha causado en los últimos 20 años no pocas ampollas a sus vecinos, recordó que es un asunto interno.
"Las decisiones que tienen que ver con los asuntos internos o la soberanía de Catar, así como la política exterior más allá de los asuntos de seguridad colectiva del Consejo de Cooperación del Golfo, se tomarán dentro del Estado de Catar", apuntó.
Y agregó: "No se aceptarán ni imposiciones ni recomendaciones del exterior".
También agradeció la labor de mediación que está haciendo Kuwait, que ya logró arreglar la anterior crisis regional, pero Al Zani recordó que Doha no ha recibido "ninguna demanda" por parte de los países del Golfo Pérsico.
Mientras, Lavrov llamó a los países del Golfo Pérsico al diálogo con Catar para solucionar la crisis regional y a la unidad contra el terrorismo yihadista.
Rusia aboga por que "cualquier discrepancia se resuelva sobre la mesa de negociaciones a través de un diálogo en pie de igualdad y respeto mutuo", afirmó.
Lavrov, quien también mantuvo ayer consultas con su colega iraní, subrayó que el "diálogo directo" es el mejor medio de "garantizar la transparencia" en todos los ámbitos.
"Por cuestión de principios no nos inmiscuimos ni en los asuntos internos de otros países ni en sus relaciones bilaterales. Pero no nos puede alegrar una situación en la que empeoran las relaciones entre socios", señaló.
Al mismo tiempo, aseguró que Rusia mantiene consultas con todos los países de la región y hará lo que sea necesario para mediar en la actual crisis con el beneplácito de los implicados.
Además, llamó a los países de la región a centrarse en "cooperar" y "aunar esfuerzos" en la lucha contra "la principal amenaza: el terrorismo", lo que calificó de "extremadamente importante".
"Para nosotros es totalmente evidente que para que las acciones en ese frente sean lo más efectivas posibles es necesario garantizar la unidad en la Liga Árabe y el Consejo de Cooperación del Golfo", apuntó.
En una conversación telefónica mantenida esta semana, el presidente ruso, Vladímir Putin, transmitió al emir de Catar que Rusia apuesta por el diálogo en la resolución de los conflictos políticos y diplomáticos.
Mientras Rusia ha optado por mantener una postura equidistante, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha negado rotundamente que Catar apoye al terrorismo, como hiciera en su momento con las acusaciones de Moscú de que Ankara apoyaba al grupo yihadista Estado Islámico.