Colombia: Imagen favorable de Santos cae al 29%

BOGOTÁ, Colombia — La imagen favorable del presidente colombiano se desplomó 11 puntos porcentuales tras un ataque mortal de las FARC contra un comando militar semanas atrás y que salpicó de pesimismo a la opinión pública respecto al proceso de paz con esa guerrilla, según una encuesta divulgada el domingo.

La favorabilidad de Juan Manuel Santos cayó al 29% en abril pasado luego de estar en 40% en noviembre de 2014, última medición hecha por la firma encuestadora Ipsos para la revista Semana, el canal RCN y las emisoras La FM y RCN Radio.

En los cuatro años y nueve meses que Santos suma en la presidencia, sólo en septiembre de 2013 su imagen había estado igualmente desgastada, en aquella oportunidad por causa de un paro nacional agrario que paralizó la economía del país.

Esta vez, el mandatario navega en medio del pesimismo generalizado. Apenas el 23% de los encuestados cree que Colombia va por buen camino. La mayoría de las áreas de gestión recibieron cifras inferiores al 50%.

La encuesta, que consultó telefónica y personalmente la opinión de 1.335 personas en 13 ciudades colombianas, se aplicó entre el 23 y el 26 de abril. El error muestral se tasó en 2,7% con un margen de confiabilidad del 95%.

Los resultados también atribuyen la caída en la favorabilidad de Santos a la negativa percepción de los consultados sobre el proceso de paz entre el gobierno y las FARC, que se adelanta en La Habana desde noviembre de 2012.

El guarismo de quienes creen que no se alcanzará un acuerdo en Cuba creció del 53% en noviembre a 69% en abril. Asimismo, el 64% de los encuestados exigió "continuar con los diálogos, pero fijando un plazo límite para finalizar", el 27% pidió "romper los diálogos y lanzar una ofensiva militar", y sólo el 7% dijo estar de acuerdo con continuarlos en los mismos términos.

A la fecha, el gobierno y la guerrilla han alcanzado acuerdos parciales sobre asuntos agrarios, de participación política y lucha contra el narcotráfico. Discuten ahora, en medio de suspicacias, la reparación de las víctimas, la dejación de las armas y la reincorporación de los rebeldes a la vida civil.