Túnez y Turquía se comprometen a estrechar su relación política y económica

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y su colega tunecino, Beji Caid Essebsi, expresaron hoy su deseo de reforzar las relaciones económicas y estrechar los lazos políticos entre los dos países.

Erdogan y Essebsi se reunieron este miércoles en el Palacio de Cartago (sede de la presidencia tunecina) en la última etapa de una gira que ha llevado al mandatario turco a viajar también a Chad y Sudán.

"Continuaremos trabajando para que el impulso en la balanza comercial continúe siendo una de las prioridades de nuestra agenda económica bilateral", confirmó Erdogan tras una rueda de prensa en Cartago.

Erdogan admitió, asimismo, que la cuestión del yihadismo, y en particular el regreso de combatientes del grupo terrorista Estado Islámico a sus lugares de origen, y la cooperación militar fueron los otros dos asuntos sobre la mesa.

Essebsi, por su parte, agradeció la visita de Erdogan y subrayó que fue una oportunidad "para valorar la situación regional y estrechar los lazos económicos y comerciales entre los dos estados. Ambos estamos interesados en ello y debemos cooperar para lograrlo", señaló Essebsi.

Tras la reunión con el presidente tunecino, Erdogan se trasladó al centro de la capital para mantener un encuentro similar con el primer ministro tunecino, Youssef Chahed, y el presidente de la Asamblea de Representantes del Pueblo (Parlamento), Mohamed Ennaceur.

Turquía es el cuarto importador de Túnez, país que quiere revisar el desequilibrado acuerdo de libre comercio que ha favorecido a Ankara.

Erdogan, que llegó anoche a Túnez, viaja acompañado por una amplia delegación de empresarios turcos, con los que ha participado en un foro económico organizado por el sindicato tunecino de industria, comercio y artesanía (UTICA).

Además, y en su intento por erigirse en mediador en el mundo árabe-musulmán, Erdogan también trató en Túnez la cuestión palestina y la polémica decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer Jerusalén como capital de Israel.

La visita desató también numerosas protestas por parte de la sociedad civil, y en particular de parte del Sindicato Nacional de Periodistas Tunecinos que se manifestaron para denunciar que "Turquía es la mayor prisión de periodistas del mundo".