Los líderes europeos, divididos ante cómo encarar el "brexit"
Los líderes europeos se mostraron hoy divididos respecto a cómo encarar la salida del Reino Unido de la Unión Europea, y mientras unos pedían calma, unidad y evitar revanchas, otros insistieron en activar el proceso de divorcio lo antes posible y en que no se puede dar marcha atrás al "brexit".
La canciller alemana, Angela Merkel, recalcó a su llegad a la cumbre europea que no habrá negociaciones "ni formales ni informales" sin solicitud británica, al tiempo que sostuvo que la UE debe mirar al Reino Unido "como amigo y socio", a pesar de la decisión de salir de la UE, que, dijo, "lamentamos mucho".
El presidente de Francia, François Hollande, afirmó que, si se mira la situación en la que se encuentra el Reino Unido tras el referéndum sobre el "brexit", "es una suerte estar en Europa", a modo de advertencia a políticos que pretenden celebrar consultas similares en otros países.
Hollande reconoció que hoy es un "día histórico" y "doloroso", pero volvió a reclamar la activación del artículo 50 del Tratado de Lisboa referente al abandono de la UE "lo más rápido posible".
"Los británicos han votado. Punto. Se pasa página", afirmó el primer ministro italiano, Matteo Renzi, en la reunión previa de los socialistas europeos.
"Si de nuestra parte aceptamos finalmente el reto de una Europa más capaz, de valores intensos, sociales, una Europa con alma y que no solo mire la cartera, creo que paradójicamente el shock del 'brexit' podría tener un efecto positivo", agregó.
"Me temo que estamos en una difícil encrucijada. La UE ha llegado a una crisis predecible, por el déficit democrático y la ausencia de cohesión y de solidaridad. Espero que el resultado del referendo británico sirva como llamada de atención a Europa", señaló a su vez el primer ministro griego, Alexis Tsipras.
El jefe del Gobierno belga, Charles Michel, pidió a Cameron "claridad sobre las intenciones del Reino Unido" e "iniciar rápido la negociación".
"No acepto estar sometidos a un chantaje infinito del Reino Unido", indicó, y también rechazó "que haya un doble juego, un folletín que dure meses y bloquee el proyecto europeo".
Michel alertó de una "larga crisis política en el Reino Unido" y pidió "que cada cual recupere la razón, que comprenda que hay que iniciar cuanto antes la negociación para una nueva relación".
"Esto no es Facebook, donde se puede definir el estado de las relaciones como complicadas. Aquí estamos casados o divorciados, pero no algo intermedio", señaló el primer ministro de Luxemburgo, Xavier Bettel, quien recalcó que es importante tener una hoja de ruta clara para las próximas semanas y meses decidida "a 27, y no a seis" en referencia a los países fundadores de la UE.
La presidenta de Lituania, Dalia Grybauskaite, por su parte, llamó a mantener "la calma y, sobre todo, la unidad", al tiempo que reconoció que hay Estados miembros "irritados con un enfoque más federalista, mientras que otros prefieren más flexibilidad".
En este contexto, pidió tener "la cabeza fría" para hallar "soluciones adecuadas" ante el "brexit", que aseguró que ya está aquí "mental y psicológicamente".
Preguntada por la posibilidad de que Londres nunca llegue a activar el artículo 50, Grybauskaite se limitó a decir: "Bienvenidos, bienvenidos de vuelta".
El primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen, aseguró que su país no será uno de los Estados miembros que sucumba al contagio del "brexit", en tanto que su homólogo estonio, Taavi Roivas, por su parte, pidió mantener la calma pero seguir avanzando: "No podemos seguir bloqueados" por el referéndum, dijo.
Pidió no caer en un espíritu de "venganza", al tiempo que se mostró partidario de dar a Londres el tiempo de reflexión que reclama.
El primer ministro de Malta, Joseph Muscat, dijo que "del primero (país que sale) podemos decir que es culpa de otros, pero si hay otro, solo podremos echarnos la culpa a nosotros mismos".