Negociaciones posbrexit se extienden, ahora bajo amenaza de veto
La incertidumbre sobre un entendimiento entre la Unión Europea (UE) y el Reino Unido por sus relaciones posbrexit aumentó el viernes con la amenaza francesa de bloquear un acuerdo no satisfactorio, mientras las conversaciones en Londres llegan a una intensa fase final.
Los equipos de negociadores mantienen en Londres una dramática carrera contra el reloj para tratar de hallar un acuerdo en los tres temas pendientes: derechos pesqueros, competición y ayudas estatales, y gestión legal del eventual acuerdo, en especial la solución de controversias.
Cualquier acuerdo aún tendría que ser ratificado por las partes antes del 31 de diciembre, ya que el 1 de enero de 2021 el Reino Unido abandonará el mercado único europeo y las relaciones comerciales pasarían a ser regidas por las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
En Londres, un portavoz del gobierno británico admitió que las negociaciones estaban en un momento difícil. "Queda muy poco tiempo. Nos encontramos en un momento difícil de las negociaciones", dijo el portavoz.
Al inicio de la jornada, el secretario británico de Comercio, Alok Sharma, apuntó en una entrevista que era una fase "difícil" de las negociaciones, y reforzó que la prioridad de Londres es hacer que "la UE reconozca que el Reino Unido es una nación soberana e independiente".
"Es sobre esta base que se hará un acuerdo", señaló.
Pero en este esfuerzo de última hora las capitales europeas ya no esconden la preocupación de que la UE insista en un acuerdo aún a precio de hacer concesiones que vayan más allá de aquello que los países están dispuestos a aceptar, las llamadas 'líneas rojas'.
En una entrevista en radio Europe 1, el secretario francés para Asuntos Europeos, Clément Beaune, dijo el viernes que "si hubiera un acuerdo que no fuera bueno (...) nos opondríamos". A la pregunta de si Francia impondría un veto dijo: "Sí, todos los países tienen derecho a veto".
Por su lado, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, afirmó este viernes en Bruselas que era necesario "garantizar" la unidad europea en las negociaciones que se desarrollan en Londres.
"Vamos a esforzarnos hasta el último momento, hasta el último segundo de este proceso para garantizar la unidad entre nosotros", expresó el funcionario.
Relación desequilibrada
En Bruselas, un diplomático europeo aseguró a AFP que varios países europeos -Bélgica, Italia, Holanda, España y Dinamarca- compartían las preocupaciones francesas sobre concesiones en las negociaciones para hallar una solución a las diferencias.
Algunos de esos países estarían preocupados por concesiones no consensuadas en materia pesquera, al tiempo que para otros los temores se concentran en las normas para la futura participación de empresas británicas en el altamente regulado mercado europeo.
"No queremos quedar trancados en una relación desequilibrada durante décadas. No queremos tener que explicar a nuestras empresas porqué son desplazadas en su mercado por corporaciones británicas en un ambiente menos regulado", expresó el diplomático.
En el ámbito europeo, fuentes diplomáticas mencionan una preocupación por la abierta preferencia de Alemania y la Comisión Europea en hallar un acuerdo rápidamente.
Este viernes, Steffen Seibert, portavoz de la canciller Angela Merkel, salió al cruce de esas versiones al afirmar que "la UE está lista para alcanzar un acuerdo posbrexit pero no a cualquier precio".
En la víspera, una fuente diplomática comentó que el equipo del principal negociador europeo, Michel Barnier, estaba "a milímetros" del límite de su mandato, y que por lo tanto no habría lugar para nuevas concesiones en esas conversaciones.
En ese cuadro, dirigentes del Parlamento Europeo ya adelantaron que precisarían de tiempo para revisar el documento antes de someterlo a ratificación, y que no se limitarán a estampar un sello a cualquier documento que les presenten a última hora.
Los líderes de la Unión Europea tienen agendada una cumbre el 10 de diciembre, y en Bruselas trascendió que varios de ellos ya adelantaron que desean tener toda la información disponible.
Así, diplomáticos europeos en Bruselas sugirieron que otra opción sería dejar que el Reino Unido salga el 1 de enero del mercado único sin un acuerdo e intentar nuevas rondas de negociación más tarde en el año 2021.