Instagram prohíbe a los influentes promocionar cigarrillos electrónicos
La red social Instagram anunció este miércoles la prohibición a sus influentes (usuarios con gran número de seguidores) que promocionen cigarrillos electrónicos, tabaco y armas de fuego en el marco de los contenidos patrocinados.
La aplicación propiedad de Facebook cierra así el último resquicio que quedaba en la plataforma para hacer promoción de estos productos, ya que si bien la publicidad directa ya estaba prohibida, los influentes podían seguir promocionándolos mediante contenidos patrocinados.
En una entrada en la página web oficial de la aplicación, los responsables de Instagram indicaron que la nueva prohibición empezará a aplicarse "en las próximas semanas".
Además, a los contenidos que promuevan las bebidas alcohólicas o los suplementos dietéticos se les requerirán "restricciones especiales", aunque no se especificaron cuáles.
El cerco sobre los cigarrillos electrónicos cada vez se estrecha más en EE.UU., con prohibiciones a nivel local y estatal y la amenaza del propio presidente del país, Donald Trump, de prohibir la comercialización de estos productos a escala nacional.
En noviembre, el estado de California presentó una demanda contra Juul, el mayor fabricante de cigarrillos electrónicos del país, alegando que la empresa dirige su publicidad a jóvenes y adolescentes pese a que la venta de estos productos está prohibida a menores de 21 años.
La querella fue presentada conjuntamente por el Gobierno del estado de California, la ciudad y el condado de Los Ángeles, y en ella se asegura que, además de dirigir su publicidad a los jóvenes, en ella "no se alertaba sobre la exposición a productos químicos y sus riesgos para el cáncer, los defectos de nacimiento y los daños reproductivos".
Además, según los demandantes, Juul no verificaba la edad de los consumidores de su producto y violaba las leyes de privacidad de los menores al conservar sus direcciones de correo electrónico y usarlas para enviarles publicidad.
Según los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), más de 42 personas han fallecido hasta la fecha en EE.UU. por daños en los pulmones causados por el consumo de cigarrillos electrónicos, y se han detectado más de 2.000 casos de lesiones pulmonares no letales.