Irán sigue cumpliendo el acuerdo nuclear pese a la retirada de EEUU
Irán sigue cumpliendo con todas las limitaciones impuestas a su programa nuclear pese a la reciente retirada de Estados Unidos del acuerdo, informó hoy el OIEA, la agencia nuclear de la ONU.
En un informe trimestral reservado, al que tuvo acceso Efe en Viena, los inspectores del OIEA confirman que la producción y el almacenamiento de uranio enriquecido y de agua pesada, así como el acceso a las instalaciones nucleares en Irán se corresponden con lo acordado en julio de 2015.
Según el llamado "plan conjunto de acción" (JCPOA, en sus siglas en inglés), Irán tiene prohibido tener más de 130 toneladas de agua pesada, así como más de 300 kilos de uranio enriquecido, con una pureza siempre inferior al 3,67 %.
Además, debe conceder pleno acceso a los inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), lo que por el momento es el caso, dos semanas después de la retirada unilateral de Estados Unidos del JCPOA, anunciada por el presidente de ese país, Donald Trump.
En lo que se refiere a medidas de transparencia, el OIEA confirma que ha seguido recogiendo datos mediante mecanismos de seguimimento a distancia y que Irán está facilitando la estancia de los inspectores internacionales en el país y su trabajo de control.
Irán aplica (sin ratificarlo) el llamado "protocolo adicional" del Tratado de No Proliferación nuclear (TNP), que permite inspecciones sin aviso previo en cualquier instalación que el OIEA desea ver.
En el informe, el OIEA destaca que "ha llevado a cabo entradas complementarias bajo el protocolo adicional a todas las instalaciones y ubicaciones en Irán que necesitaba visitar".
En todo caso, advierte de que "una cooperación más activa y más puntual de Irán para conceder este acceso facilitaría la aplicación del protocolo adicional y mejoraría la confianza".
Según un diplomático conocedor de la inspección del OIEA en Irán, "no hubo ningún problema de acceso" pero parece que los inspectores quieren "motivar" a los iraníes a ser más activos para que cumplan todo lo establecido en el protocolo adicional.
"No les falta confianza", aseguró la fuente en declaraciones a la prensa en Viena bajo la condición del anonimato.
En términos generales, el OIEA insiste en su informe en que Irán sigue cumpliendo el acuerdo firmado en 2015 con Alemania, China, Estados Unidos, Francia, el Reino Unido y Rusia, que impone limitaciones por un periodo de entre 10 y 25 años a su programa atómico.
"Irán no ha enriquecido uranio por encima del 3,67 %" de pureza, señala el OIEA, un nivel en el que este combustible atómico sólo puede ser empleado para aplicaciones civiles, y no militares.
Con todo, Irán sí ha aumentado sus reservas de agua pesada, desde 117,9 toneladas registradas el pasado 11 de febrero a 120,3 toneladas el 6 de mayo.
El agua pesada se produce en la central de Arak, donde Irán tenía planeado construir un reactor con la capacidad de generar plutonio, un material susceptible de alimentar armas atómicas, pero cuyas obras siguen paralizadas, según el informe restringido, al que tuvo acceso Efe.
Esa cantidad está por debajo de las 130 toneladas que establece como límite el acuerdo nuclear.
"A lo largo del periodo sobre el que se informa, las reservas de totales de uranio enriquecido de Irán no han excedido los 300 kilos de UF6 (hexafluoruro de uranio) enriquecido hasta el 3,67 %", señala el OIEA, certificando el cumplimiento de otro de los compromisos.
El volumen acumulado de ese combustible nuclear llegó a 123,9 kilos el 14 de mayo, casi 14 kilos más que en febrero.
Además, el OIEA señala que el Gobierno de Teherán mantiene limitado el número de centrifugadoras activas, la maquinaria que se emplea en el enriquecimiento de uranio.