Arrecian combates entre Israel y Hamás en Gaza antes de votación en la ONU

Tropas israelíes y milicianos de Hamás libraron el viernes nuevos y encarnizados combates en la Franja de Gaza, antes de una votación del Consejo de seguridad de la ONU sobre un cese el fuego de la guerra que en poco más de dos meses redujo a escombros al pequeño territorio palestino.

El ejército israelí expandió esta semana sus operaciones hacia el sur de la Franja, donde hallaron refugio casi dos millones de civiles desplazados, de los cerca de 2,4 millones de habitantes del enclave.

Los combates se centran actualmente en Jan Yunis, la ciudad más importante del sur de la Franja, aunque también se prosiguen en el norte, en la ciudad de Gaza y en Jabaliya.

En el norte de Jan Yunis, los bombardeos arrasaron el barrio de Al Katiba, constató un corresponsal de AFP. 

"Estábamos en una zona considerada segura (...) Después del bombardeo, escuchamos gritos", relató Mohamed Jaarar, un habitante de Jan Yunis. 

Según el Ministerio de Salud de Hamás, en el poder en Gaza, 17.487 personas han muerto en la ofensiva israelí, en su mayoría mujeres y menores de 18 años.

"Una venganza flagrante"

Israel prometió aniquilar a Hamás, calificado de terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, después de la incursión de milicianos islamistas que el 7 de octubre mataron a 1.200 personas y secuestraron a unas 240, segun el balance israelí.

La Unión Europea añadió este viernes a dos comandantes de Hamás, Mohamed Deif y a Marwan Issa, a su lista de sancionados por terrorismo. 

El jueves por la noche, las televisiones israelíes mostraron a decenas de palestinos en ropa interior y con los ojos vendados custodiados por soldados en la Franja de Gaza, unas imágenes que provocaron controversia en redes sociales.

El ejército israelí dijo "investigar" para "verificar quién está vinculado a Hamás y quién no".

Izzat al Rishq, miembro del comité político de Hamás, acusó a Israel de haber "apresado a un grupo de civiles palestinos desplazados" y desnudarlos. 

Desde el inicio de la ofensiva, 93 soldados israelíes han muerto en Gaza.

En una llamada con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, "insistió en la necesidad absoluta de proteger a los civiles y diferenciar a la población civil de Hamás", informó la Casa Blanca.

Además de los bombardeos y de la operación terrestre, Israel impone desde el 9 de octubre un asedio prácticamente total a la Franja de Gaza, que provoca escasez de agua, comida, medicamentos y electricidad en este territorio de 362 km2.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó que el sistema de salud está "de rodillas" en Gaza, ya que la mayoría de hospitales del norte no están operativos y los del sur se hallan desbordados con miles de heridos.

El jefe de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa), Philippe Lazzarini, urgió a un "cese el fuego humanitario inmediato", para evitar una "hecatombe de vidas palestinas".

El gobierno israelí autorizó esta semana la entrega de un "suplemento mínimo" de combustible para evitar un "colapso humanitario" y epidemias en Gaza, dos días después de que Washington lanzara un llamamiento en ese sentido.

Votación del Consejo de Seguridad 

El Consejo de Seguridad de la ONU se reúne este viernes para pronunciarse sobre un llamado a un cese el fuego humanitario en Gaza, por iniciativa del secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

"La violencia perpetrada por Hamás no puede justificar en ningún caso el castigo colectivo al pueblo palestino", afirmó Guterres.

Guterres invocó el artículo 99 de la carta de la organización que le permite "llamar la atención del Consejo", sobre una cuestión que "puede poner en peligro el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales".

El resultado de la votación es incierto, ya que hasta ahora Estados Unidos se opone a un cese el fuego. 

Advertencia de Netanyahu a Hezbolá

En Cisjordania, un territorio palestino ocupado por Israel desde 1967, la Autoridad Palestina indicó que las fuerzas israelíes mataron a tiros a seis palestinos en un campo de refugiados.

Contactado por la AFP, el ejército israelí no comentó por el momento lo sucedido.

El conflicto reavivó también las tensiones en la frontera entre Israel y Líbano, donde se registran duelos diarios de artillería entre el ejército israelí y el movimiento libanés proiraní Hezbolá, aliado de Hamás.

Netanyahu lanzó una nueva advertencia al movimiento chiita libanés: "Sugiero a nuestros enemigos prestar atención, porque si Hezbolá opta por desencadenar la guerra total, convertirá Beirut y el sur de Líbano en Gaza y Jan Yunis".