Los talibanes dominan el 40% de Afganistán, según EEUU
La guerra de Afganistán continúa "estancada" con los insurgentes talibanes controlando el 40 % del país, un aumento del terreno dedicado al cultivo de opio y miles de muertos en las fuerzas gubernamentales, indicó hoy el informe del Inspector Especial para Afganistán (SIGAR, por sus siglas en inglés) de EE.UU.
"La situación sigue estancada (...) El número de distritos bajo control talibán no ha registrado cambios" desde el último análisis a comienzos de año, explicó el reporte dirigido por John Sopko y presentado al Congreso.
Las fuerzas gubernamentales controlan el 59,7 % de los distritos, especialmente los de mayor densidad de población, mientras que los rebeldes talibanes dominan el 40 % restante.
Cerca de 3 millones de personas viven en zonas controladas por los talibanes, 10 % del total, mientras que 21 millones lo hacen en territorio controlado por el Gobierno, afirmó el SIGAR.
Pese al esfuerzo de las autoridades de Kabul, las bajas entre las fuerzas afganas siguen siendo numerosas y los enfrentamientos constantes.
Entre enero y mayo se registraron 2.531 fallecidos entre estas fuerzas y otros 4.238 resultaron heridos, cifras similares a las del pasado año.
Por lo que respecta a la producción de opio, una de las principales fuentes de ingresos de los talibanes, la superficie de terreno cultivada "se ha incrementado 10 %" en 2016.
"Pese a la inversión de EE.UU. de 8.500 millones de dólares para contrarrestar la economía de narcóticos ilícitos, Afganistán continúa como el mayor productor y exportador mundial, y es el origen del 80 % de la heroína del mundo", agregó.
El SIGAR consideró que el valor del opio y sus derivados, como la heroína, producidos en Afganistán ha aumentado de 1.500 millones de dólares en 2015 a 3.000 millones en 2016.
El oscuro panorama que dibuja el reporte se conoce cuando aún está por definir la estrategia en Afganistán del presidente estadounidense, Donald Trump, quien lleva ya seis meses en el poder pero no ha concretado sus planes para una guerra en la que EE.UU. lleva inmerso desde 2001.
Desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015, la Alianza continúa en Afganistán con alrededor de 13.000 uniformados en tareas de asesoramiento y capacitación, y Estados Unidos mantiene a cerca de 8.400 como parte de ese operativo de asistencia y en tareas antiterroristas.
Trump visitó el pasado 20 de julio la sede del Pentágono para revisar las opciones con los generales, sin ofrecer detalles al respecto.
Según los medios estadounidenses, Washington está evaluando el envío de cerca de 4.000 nuevos uniformados para tratar de impulsar el combate contra los insurgentes en el país.
En la contienda, que se prolonga ya por casi 16 años, han perdido la vida 2.255 estadounidenses y EE.UU. se ha gastado más de 700.000 millones de dólares entre labores de reconstrucción y esfuerzo bélico.