Están conscientes de que algunos vecinos no colocan bien los desperdicios ni tienen cultura de sacarlos al momento en que pasan los camiones recolectores de basura.

Otros se quejan de que la empresa no recoge la basura constantemente.

La mala disposición de los desechos es un problema de nunca acabar.

En el área cercana a un centro de salud, un contenedor cargado de bolsas de basura generó la molestia de las personas que acuden al sitio.

Además, en un cuadro deportivo cercano, los malos olores afectan a los que acuden para hacer ejercicio.

La empresa Revisalud informó el 30 de diciembre, que la morosidad en la tasa de aseo en ese distrito asciende a los 38 millones de dólares.

Con información de Fabio Caballero