Productores de arroz implementan nuevas técnicas sostenibles para mejorar la productividad nacional

Ciudad de Panamá, Panamá/Los productores de arroz en Panamá han adoptado nuevas técnicas agrícolas durante más de un año con el objetivo de mejorar la productividad y sostenibilidad de este importante rubro alimentario, en un país que consume 80 kilogramos per cápita anualmente.

Entre las principales innovaciones implementadas se encuentra la promoción de la mínima labranza, una técnica más sostenible que permite una menor intervención del suelo. Además, se ha introducido el uso de siembra directa con sembradoras mecanizadas que utilizan semillas secas.

De acuerdo con expertos en el sector, en vez de lanzar semillas al voleo, se utilizan sembradoras de precisión. Agregaron que esto puede reducir las densidades de siembra a dos quintales por hectárea de semilla. Esta modernización representa un cambio significativo en las prácticas tradicionales, buscando optimizar el uso de recursos y mejorar los rendimientos por hectárea.

A pesar de los avances tecnológicos, el sector enfrenta múltiples desafíos para abastecer al país y alcanzar la autosuficiencia alimentaria. El acceso a nuevas tecnologías y al crédito se mantiene como las principales barreras para muchos productores. Los productores también enfrentan dificultades adicionales relacionadas con la competencia de las importaciones.

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Aunque todos los productores cuentan con una buena Aplicación de Prácticas de Conservación (APC), muchos no poseen la maquinaria necesaria para cumplir con los nuevos estándares. Las casas comerciales están siendo más rigurosas en la emisión de Certificados de Operación Agrícola (COA).

Esta situación amenaza con dejar fuera de la producción a varios agricultores que no logran cumplir con estos requisitos más estrictos durante la presente temporada. El sector arrocero representa un segmento importante para el sistema financiero nacional. Según datos del Banco Nacional, este rubro constituye el 15% de su cartera de clientes, con una inversión total que ronda los 111 millones de dólares.

Esta cifra se compone de dos carteras principales: 58 millones de dólares destinados a apoyar directamente el cultivo de arroz y 53 millones de dólares dirigidos al proceso de agroindustria del arroz.

Con un consumo anual de al menos 80 kilogramos per cápita, Panamá se posiciona como uno de los países de América Latina y el Caribe que más consume arroz, lo que subraya la importancia estratégica de garantizar la producción nacional de este grano básico.

Con información de Jessica Román