Gobierno, obligado a buscar mecanismos para traslado de migrantes

La continua llegada de migrantes cubanos, haitianos y africanos ha obligado a las autoridades a buscar mecanismos para retirarlos lo más rápido posible del suelo panameño. En la balanza está el trato humanitario y el riesgo que puede representar una crisis migratoria y sanitaria.

Son miles de migrantes los que llegan a diario por tierra a Panamá como parte de su recorrido hacia Estados Unidos, pero muchos están varados en el país al quedarse sin dinero.

Recientemente la Gran Terminal de Transporte de Albrook se convirtió en un hogar temporal.

Benjamín Solís, gerente de Operaciones de la Terminal de Transporte de Albrook dijo que se recibían aproximadamente de 75 a 100 personas por día, situación que se extendió de 20 a 25 días.

Una nueva crisis toma auge y el tránsito de cubanos, africanos y haitianos volvió a aumentar.

Santiago Garcés, salió de Cuba junto a su esposa e hijo y la travesía lo agobia principalmente por las calamidades que puede pasar el niño.

Leo Alcidas, es otro migrante, salió de Haití hace algunos años hacia Brasil, pero decidió dejar ese país suramericano.

Los compañeros con los que emprendió este duro viaje ya no están a su lado, se separaron en el camino, no sabe de ellos ni de su familia.

Los migrantes se encuentran ahora en las instalaciones de la Cadena de Frío, estructuras que nunca han sido utilizadas para su función y que ahora están sirviendo de albergue temporal.

El Gobierno Nacional ha decidido brindarles apoyo en el traslado desde Darién hasta este punto y posteriormente el viaje directo a la frontera de Panamá con Costa Rica.

Sin embargo existe una preocupación sanitaria y las autoridades de salud de Costa Rica y Panamá ya han informado que aumentarán los controles de atención y prevención de enfermedades a los residentes de las áreas fronterizas y los migrantes.