Eduardo Espinosa el trabajador más joven en la Ampliación del Canal que operó una Grúa Telescópica

@CecybelLopez/Este joven coclesano de 24 años de edad rompió las reglas del juego, con disciplina y mucho entrenamiento no dejó que su edad fuera impedimento para probar que tenía el talento de operar máquinas pesadas.

Su oportunidad llegó a la edad de 18 años, con un sí lleno de energía se fue a trabajar a la Hydro Caisán, proyecto que se realizó en la Provincia de Chiriquí, allí inició su aprendizaje.

Eduardo nos señaló que luego de foguearse duro junto a su mentor el Señor Joaquín Muñoz, deciden ponerlo a prueba y con satisfacción logró pasar cada una de ellas, demostrando que a su corta edad de 19 años podía estar a cargo como operador de maquinarias pesadas. Su edad le quiso hacer la jugada, nos contó con una gran sonrisa, pero cuando estás destinado, nada se opone a eso.

Luego de trabajar por 4 años en el proyecto de la hidroeléctrica, la empresa contratista le ofrece la oportunidad de pertenecer al equipo de operadores de máquinas pesadas de La Ampliación del Canal de Panamá, sin pensarlo dos veces, dijo sí, y emprendió un nuevo camino.

Su trabajo era operar un tipo de grúa conocida como “Grúas Telescópicas” de la marca Krupp con un poder de levante de 80 toneladas, este tipo de grúas funciona en tareas de salvataje por su precisión y mayor llegada, gracias a los cilindros que la componen, también son empleadas en el sector de la construcción y traslado de carga en barcos.

Nos señaló que cada operación es una maniobra, que sintió muchas veces susto y que es lo normal cuando se realiza ese tipo de función. Con la máquina a su cargo, realizó el trabajo de montar los rieles donde encajaron las válvulas de La Ampliación y se instalaron las rejillas que sirven de coladera para evitar que se filtren peces y basura hacia esa área. La grúa en este tipo de trabajo estuvo a su capacidad de límite y se debe tener mucha precisión y seguridad al manejar, puntualizó.

Otro de los muchos trabajos que realizó y que recuerda con mucha emoción fue el de descargar los carros que se usarían para el traslado de las compuertas de las esclusas.

Comenzó a los 21 años en las esclusas de Gatún en Colón, donde estuvo dos años y medio y luego pasó a Cocolí por un término de 8 meses.

Con un gesto de inseguridad y una mirada profunda de esas que paralizan, Eduardo nos dijo: Yo no conozco de terminología y estoy seguro que no respondí como usted esperaba a las preguntas que me hizo, pero de lo que sí estoy seguro es que mi trabajo quedó impreso en la Construcción del Tercer Juego de Esclusas y la Ampliación del Canal de Panamá.

Hoy me siento feliz de ver la Ampliación hecha una realidad, aunque no estaré en su inauguración, tengo la satisfacción de que ese día el mundo entero y los invitados a ese acto, serán testigos de la obra terminada; donde cada uno de los obreros, ingenieros y personal en general, fuimos los gestores de lo que ellos verán, nos comentó con los ojos llenos de nostalgia.

“Mi último día de trabajo fue el 23 de junio de 2016, y respondiendo a su pregunta le digo que estoy orgulloso y feliz del deber cumplido”.