Rivera: "No me rendiré mientras haya esperanza"
Un año especial es el que vive Mariano Rivera, no solo por ser el último de su carrera en el béisbol de las Grandes Ligas, sino también por las muestras de cariño y aprecio tanto de los fanáticos como de sus colegas. No obstante los Yanquis de Nueva York no han podido tener el año que esperaban para darle a su cerrador la despedida que consideran él se merece. Si la temporada regular terminara hoy los Yanquis no clasificarían a los "playoffs", ya que su marca es de 70 victorias y 63 derrotas que les dejan a 8.5 juegos detrás de los Medias Rojas de Boston, líderes de la División Este de la Liga Americana. Además está a cinco juegos de los Rays de Tampa Bay y los Atléticos de Oakland, que tienen en este momento los comodines en el Nuevo Circuito. A pesar de esa realidad, Rivera prefiere vivir el presente y hacer su trabajo cuando tenga la oportunidad. "Sé que este ha sido un año difícil para el equipo", comentó el lanzador panameño en una entrevista al New York Daily News. "Sin embargo no me pongo a pensar si no somos capaces de hacerlo, soy optimista." Rivera agregó que clasificar a la postemporada en las Grandes Ligas no es asunto fácil, pero aseguró que "él no se rendirá" mientras hayan posibilidades. "Este ha sido un año especial. Recibir el cariño de los fanáticos en cada despedida que se me ha hecho en los diferentes estadios significa mucho para mí", expresó. Durante la entrevista el serpentinero de Puerto Caimito recordó la ovación recibida de parte de los fanáticos y de sus compañeros en el Citi Field, casa de los Mets de Nueva York, durante el Juego de las Estrellas de este año. "Correr del bullpen al montículo, escuchar la ovación de los fanáticos y los aplausos de los jugadores de las ligas Americana y Nacional me llenó de emoción", describió. "Eso muestra que el respeto que le tienes al juego de béisbol se transmite a las personas que te rodean. Me siento agradecido y bendecido por eso." El desgaste propio de los constantes viajes es la razón principal por la que el "número 42" de los Yanquis se retira, tal y como él mismo lo reconoció. "No es que le haya perdido el amor al béisbol, sino que me siento cansado de los viajes. Creo que ya es tiempo de dar un paso adelante." Rivera comentó que, luego de su retiro, le gustaría ser una especie de asesor especial para otros peloteros jóvenes con deseos de convertirse en profesionales.