Ferrer espanta la etiqueta de favorito en US Open
Sin Rafael Nadal de por medio, David Ferrer comparece al Abierto de Estados Unidos como la carta principal del tenis español. Ferrer hizo valer su condición de cuarto preclasificado del torneo al vencer el miércoles 6-4, 6-2, 7-6 (3) al sudafricano Kevin Anderson por la primera ronda. El US Open es un torneo particularmente especial para el jugador de 34 años. Fue aquí, en 2007, donde alcanzó por primera vez las semifinales de un Grand Slam. La regularidad es una característica que define cabalmente a Ferrer, quien ha pulido este año sus mejores resultados en las cuatro grandes citas, con cuartos de final en Australia y Wimbledon y semifinales en Francia. También ha redondeado una campaña de éxitos personales sin precedentes en el circuito: cinco títulos en tres superficies diferentes. La baja de Nadal por una lesión en la rodilla izquierda le hizo subir un escalón en la preclasificación, y de paso aumentaron las expectativas de que Ferrer llegue lejos en Flushing Meadows. Pero el número cinco del mundo prefiere hacerle la cruz a la palabra favoritismo. "No pienso en ello", dijo Ferrer. "El tenis es un deporte individual, cada uno intenta jugar su partido lo mejor posible, pero por sí mismo". "Con Rafa, es un lástima que no esté aquí, porque es un buen amigo mío, es un buen compañero y se le echa de menos", añadió. "Cuando está él, pues es mucho más favorito que todo el mundo porque es mejor". También el miércoles, el argentino Leonardo Mayer avanzó a la segunda ronda con un triunfo 6-4, 6-4, 7-5 sobre el polaco Lukasz Kubot. El estadounidense Brian Baker prosiguió su notable regreso tras una insólita seguidilla de cinco de cirugías al vencer 6-3, 6-4, 6-2 al checo Jan Hajek. Victoria Azarenka, la número uno mundial y campeona del Abierto de Australia, no ha dado tregua en dos presentaciones en Flushing Meadows. La bielorrusa eliminó 6-2, 6-2 a la belga Kirsten Flipkens.