'Recordar es vivir'... y también aprender

Una vez escuché a uno de mis mejores amigos decir que de los errores se aprende más de que los aciertos. Un día como hoy es bueno recordar uno de los errores que más ha marcado al fútbol panameño: el 15 de octubre del 2013. Un día para olvidar para unos, pero para otros – como yo – 90 segundos que marcaron la historia, una historia que sigue desenvolviéndose con el pasar de los años.

Cuando dije dolor de crecimiento, unos dijeron: ¿y hasta cuándo vamos a crecer?. En verdad si nos ponemos a ver, las cosas son claras y sin engaños. ¿Cuántos Maradonas han salido de Panamá? ¿Cuántos Ronaldos, cuántos Messi?... y así puedo irme contando, pero la idea es que los panameño abramos los ojos y nos demos cuenta que estamos creciendo, seguimos creciendo y sufriendo todo lo que sufre una madre al momento del parto. Pueden ser horas de parto, días o incluso años, pero al final cuando logras el objetivo, te das cuenta que todo eso valió la pena. Señores, Panamá ha sido reconocida a lo largo de la historia – desde que fuimos República en 1903 – por todos los deportes menos el fútbol; entonces, por qué queremos cosechar sin sembrar. Eso sí, sembrar en tierra fértil y no en la arena.

No sé si soy proselección o el hombre más optimista del mundo, pero de lo que estoy seguro es que no sé si yo o mis hijos, van a decir un día, cuando vayamos a un Mundial: “POR FIN ALCANZAMOS LA VICTORIA”.

Vendrán más 15 de octubre, no sé, no soy adivino, pero de lo que sí estoy seguro es que podemos aprender a no repetir los errores de siempre y, por supuesto, tenemos que hacer las cosas diferentes. Porque no hay peor tonto que el que hace lo mismo todo los días y espera resultados diferentes…

Por: Laureano Barría