Rusia no renuncia a sus planes de llegar a la Luna, según Putin
El presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró hoy que el programa para enviar a un cosmonauta a la Luna hacia 2030 sigue adelante, al visitar el Museo de la Cosmonáutica de Moscú en el 57º aniversario del histórico vuelo de Yuri Gagarin, el primero de un hombre al espacio.
"Ya estamos terminando el trabajo en la nave Federatsia (Federación)", afirmó Putin, en referencia al nuevo transbordador espacial que sustituirá en un futuro próximo a las envejecidas Soyuz y que a diferencia de éstas será recuperable para ser utilizado en varios lanzamientos.
Además, Rusia ya ha empezado a desarrollar el cohete superpesado que se empleará en los vuelos a la Luna y cuyo "primer ensayo está previsto para dentro de diez años", agregó el presidente ruso.
"No hay duda, trabajaremos activamente para llevar a cabo este programa", señaló.
Este prevé en primer lugar participar en el proyecto de una estación espacial internacional en la órbita del satélite natural de la Tierra, luego alunizar y levantar allí módulos permanentes para investigar su superficie.
Rusia no tiene ninguna intención de abandonar los ambiciosos proyectos internacionales para la conquista del espacio, pese a las malas relaciones actuales con Occidente, sobre todo con Estados Unidos, la otra gran potencia espacial mundial.
"Se trata de un ámbito de cooperación que une. Confío en que siga siendo así. No tenemos intención de romper nada, de salir de ningún programa. Tenemos socios para la Luna, y luego para investigar Marte. Ahí están Estados Unidos, Canadá, Japón, la Unión Europea", afirmó Putin.
Hace sólo medio año, las agencias espaciales de Rusia y EEUU -Roscosmos y NASA- acordaron crear una estación en la órbita de la Luna, cuyo primer módulo será lanzado al espacio en 2022 y que contará con una tripulación integrada por astronautas de varios países, al igual que la Estación Espacial Internacional (EEI).
"Todos estos planes se van a llevar a cabo. Son interesantes, necesarios para el país y para toda la humanidad", recalcó el presidente ruso.
En un documental difundido en la televisión rusa poco antes de las elecciones presidenciales del pasado marzo, Putin explicó que el nuevo programa lunar ruso prevé alunizar en los polos del satélite natural.
"Nuestros expertos intentarán desembarcar en los polos, porque hay fundamentos para pensar que ahí puede haber agua. Ahí hay cosas que hacer, y desde ahí puede empezar el estudio de otros planetas, del espacio lejano", dijo entonces.
Por otro lado, el jefe del Kremlin anunció planes para el nuevo cosmódromo Vostochni, inaugurado en 2016 en la región oriental de Amur, cerca de la frontera con China.
"Hemos creado un cosmódromo y ahí crecerá poco a poco una ciudad. Confío en que será el emplazamiento para un clúster de alta tecnología en el Lejano Oriente", apuntó Putin.
El cosmódromo, con una superficie de 700 kilómetros cuadrados, fue construido para aligerar la carga de lanzamientos que soporta el de Baikonur, en Kazajistán, y garantizar en el futuro la independencia de Rusia en el cumplimiento de su programa espacial.