Festival de Viña del Mar, broche de oro para verano de Ciudad Jardín
La 58ª edición del Festival de la Canción de Viña del Mar, que se celebra durante esta semana, pone el broche de oro al verano austral en una ciudad que estos días se encuentra repleta de turistas, atraídos por la ecléctica oferta musical del certamen.
"Además de reforzar la posición de Viña como principal destino turístico del país, el festival tiene un gran prestigio y es el único evento musical que se ha realizado de forma ininterrumpida por más de medio siglo. Mi deber es cuidarlo y que cada año sea más valorado", explicó a Efe la alcaldesa de la ciudad, Virginia Reginato.
En los últimos años, el cartel del certamen se ha adaptado a los nuevos tiempos y ha incluido géneros como el reguetón, en perjuicio de la música melódica que ha reinado tradicionalmente en el 'festival de festivales'.
"La parrilla de artistas siempre generará opinión, pero objetivamente está estructurada con la idea de que haya música para todos los gustos, con figuras consagradas y emergentes de gran calidad. Así brindamos un espectáculo para un público transversal", apuntó Reginato.
La apuesta de la alcaldesa parece haber calado entre los asistentes al festival, que han llenado las gradas de La Quinta Vergara todas las noches y que mantendrán esta línea la última noche: para la actuación hoy de J Balvin ya se ha colgado el cartel de 'no hay entradas'.
"Está bien que sea para todos los gustos. Uno puede ir a escuchar algo más relajado o puede ir a disfrutar del reguetón. También se nota en las edades, unos artistas gustan más a los mayores y otros a los jóvenes. Está mezcla está bien, es mucho mejor que un sólo estilo", opinaron Valentina y Catalina Opazo, dos jóvenes de la ciudad sureña de Concepción que viajaron a Viña del Mar para el festival.
Esa llegada de turistas, ya de por sí abundantes al ser la Ciudad Jardín uno de los principales centros de veraneo de Chile, repercute en la ocupación hotelera, que durante estos días ronda el 90 % de su capacidad.
Y de hecho, los cuatro grandes alojamientos de la ciudad carecen de habitaciones libres.
"Durante la época estival aumenta significativamente el número de visitantes. El municipio trabaja continuamente en esta área para enfrentar este desafío", respondió la alcaldesa de Viña del Mar.
Según un informe de la Cámara de Comercio regional, el 50 % de los turistas que llegan son argentinos, circunstancia que no pasa inadvertida para la administración.
"Venimos de Mendoza (oeste de Argentina) aprovechando que el cambio del peso argentino al chileno nos sale muy beneficioso y que Viña tiene ahora el festival. Es fantástico para pasar unos días con los niños", indicó Omar Ruiz, que acudió con su familia esta semana.
Los comercios son los otros grandes beneficiarios del certamen. Para ellos, se trata del broche de oro que cierra una temporada alta en la que coinciden el verano y las rebajas.
"Esta semana se nota una subida en las ventas en torno al 5 %. Nosotros aprovechamos para sacar la nueva temporada porque se vende bien", dijo Javier Fernández, propietario de una tienda de ropa de la calle Valparaíso, en el centro de Viña del Mar.
Y como no podía ser de otra forma, también los bares del centro de la ciudad están llenos durante la mayor parte del día, atestados de lugareños y turistas que, al igual que el festival, quieren cerrar el verano austral con alegría y buenas vibraciones.