China afirma estar "abierta" a comunicarse con la UE sobre crisis refugiados
China aseguró hoy "estar abierta" a comunicarse con la Unión Europea (UE) con respecto a la crisis de los refugiados y dijo que la solución pasa a través de mecanismos bilaterales y multilaterales.
Un portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Hong Lei, daba esta respuesta en una rueda de prensa celebrada hoy en Pekín acerca de si China está en contacto con países de la UE y otras naciones sobre la crisis de refugiados en Europa.
Hong evitó dar una explicación más concreta y subrayó que, para solucionar la crisis, "se necesita atajar algunos problemas de fondo, como la inestabilidad económica", entre otras cosas, de los países de origen.
Por otro lado, aseguró que China "cree que la UE gestionará de la forma adecuada esta crisis para mantener la seguridad regional y la estabilidad".
El portavoz se expresó sobre el asunto de una forma mucho más moderada que la manifestada por un editorial de la agencia oficial Xinhua hace seis días, bajo el título "EEUU debería acarrear con la culpa de la crisis humanitaria de refugiados en Europa".
"Los principales orígenes de los refugiados -Siria, Libia, Irak y Afganistán- son objeto de las intervenciones de EEUU, que han llevado a la devastación y al caos y que han deteriorado la seguridad y provocado desplazamientos", decía el artículo.
"Parece que Washington -agrega- no se ha dado cuenta de su obligación moral para solucionar la crisis y atajar la raíz del problema".
El presidente de EEUU, Barack Obama, ha ordenado a su Gobierno que inicie los preparativos para acoger al menos a 10.000 refugiados sirios durante el nuevo año fiscal, que empieza este 1 de octubre, anunció la Casa Blanca.
China mantiene una política muy ambigua con respecto a la acogida de refugiados, a quienes en ocasiones llama eufemísticamente "emigrantes económicos" para evitar tener que responder a las peticiones de asilo de, tradicionalmente, norcoreanos u oriundos de países del sureste asiático.
En la potencia asiática hay unos 300.000 refugiados reconocidos, según cifras de ACNUR (Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados), casi en su totalidad procedentes de las antiguas colonias francesas de Indochina (Vietnam, Camboya y Laos) e integrados en el país desde 1975.