El presidente de Costa Rica firma decretos para contener el gasto público
El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, firmó este viernes cuatro decretos para frenar aumentos salariales, anualidad y pluses como parte de las medidas anunciadas para contener el gasto público y paliar el déficit fiscal.
Durante el acto oficial, el mandatario costarricense también firmó cinco directrices y un proyecto de ley con lo que pretende "dar fe del compromiso absoluto" para resolver el tema fiscal, uno de los más agobiantes del país, con un déficit del 6,2 por ciento en el 2017 y una proyección de 7,1 por ciento para este año.
"Nosotros queremos que en el año 2021 Costa Rica tenga una economía que crece con finanzas públicas sanas, con generación de empleo, con una mejor infraestructura para el país, mayor seguridad ciudadana y tranquilidad en los barrios. Para lograr esas cosas necesitamos hacer desde hoy la tarea, y la tarea principal es resolver este tema" fiscal, destacó Alvarado.
Las medidas forman parte de la propuesta "Sostenibilidad fiscal por el bienestar de Costa Rica", que fue presentada esta semana ante el Congreso por la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, para enfrentar el déficit fiscal.
Entre las acciones de contención del gasto anunciadas destacan que los incrementos salariales del sector público serán por una suma fija, y no habrá incremento en el monto que se paga por algunos pluses salariales.
Además de utilizar un máximo del 25 por ciento de las plazas vacantes en el sector público; que el 10 por ciento de los empleados haga teletrabajo, la renegociación de convenciones colectivas y no pagar nuevos alquileres de edificios.
El Gobierno también establecerá una nueva escala para reducir el pago por dedicación exclusiva para nuevos funcionarios y renegociará los pluses abusivos de las convenciones colectivas.
El presidente Alvarado urgió al Congreso la aprobación de la reforma tributaria y además de una nueva ley de empleo público que ordene las escalas salariales y los pluses, para continuar siendo "responsables con el manejo de las finanzas públicas".
La reforma tributaria, llamada Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, tiene como punto estrella la conversión del impuesto de ventas del 13 por ciento en uno de valor agregado (IVA) de la misma tasa pero que gravará los servicios y más productos.
Costa Rica registró un déficit fiscal del 6,2 por ciento del PIB en 2017 y las proyecciones oficiales indican que en 2018 llegará al 7,1 por ciento si no se aprueba una reforma.