Bajo presión del Congreso, Hillary Clinton pide publicar sus correos electrónicos
Hillary Clinton, a quien los republicanos reprochan haber usado exclusivamente una dirección electrónica personal mientras era jefa de la diplomacia estadounidense, pidió hacer públicos su correos.
"Quiero que la gente vea mis correos. Le pedí al departamento de Estado que los publique. Ellos (el Departamento de Estado) dijeron que los revisarían para divulgarlos tan pronto como sea posible", escribió Clinton en la red social Twitter.
Durante sus cuatro años al frente del departamento de Estado (2009-2013), la también ex primera dama jamás usó su dirección electrónica oficial (que termina en state.gov). Prefirió una dirección personal, lo que podría constituir una violación de las normas vigentes y plantea la cuestión de la seguridad de las comunicaciones sensibles.
Los republicanos del Congreso presentaron el miércoles una solicitud para obtener todos los correos electrónicos enviados durante ese período.
Desde Riad, el sucesor de Clinton en el Departamento de Estado, John Kerry, confirmó que su despacho "ha tenido un amplio acceso a los registros de Clinton, incluyendo correos electrónicos".
"Estamos en proceso de revisión de aquellos (registros) que tienen estatus público, como lo hacemos con cualquier documento, y vamos a emprender esta tarea lo más rápidamente posible ", dijo.
El presidente de la comisión investigadora sobre el ataque contra la misión diplomática de Bengasi en 2012, el republicano Trey Gowdy, dijo haber descubierto recientemente que el departamento de Estado no produjo correspondencia en esos cuatro años ya que Clinton utilizaba exclusivamente un sistema privado de correos electrónicos.
El departamento de Estado respondió a la solicitud de Clinton asegurando que publicaría los correos implicados según "los procedimientos normales que rigen este tipo de publicación".
"Llevaremos a cabo esta revisión lo antes posible. En vista del gran volumen de información involucrada, este análisis llevará tiempo", explicó una de sus portavoces, Marie Harf.
Entre la espada y la pared
Hillary Clinton se encuentra ahora entre la espada y la pared, con los republicanos prestos a arremeter contra ella por su actuación y los demócratas evitando defenderla por su inminente entrada en la carrera por la candidatura demócrata a la presidencia para 2016.
Varios parlamentarios demócratas declinaron comentar el asunto, que algunos observadores llaman ya el "e-mailgate".
"No sé" si el escándalo podría tener un efecto sobre la eventual candidatura de Clinton, dijo el diputado demócrata John Lewis.
Clinton salió de su reserva tras una serie de ataques desde el campo republicano. Uno de sus rivales potenciales para la presidencial del año próximo, el exgobernador republicano de Florida Jeb Bush, pidió inmediatamente la publicación de los correos electrónicos concernidos.
Otro rival potencial, el exgobernador de Texas Rick Perry, dijo que este asunto ilustra "la falta de transparencia" de Hillary Clinton.
"Es un problema ético que ella tendrá que resolver", declaró a la cadena Fox News.
"Por lo que vi hasta ahora pienso que no es más que una forma de atacar a Hillary Clinton, nada más", dijo indignada, por su parte, la legisladora demócrata Elijah Cummings, que forma parte de la comisión investigadora.
El mes pasado, medios estadounidenses revelaron que su fundación familiar había aceptado donaciones de gobiernos extranjeros.
Según The New York Times, 50.000 correos electrónicos de Hillary Clinton fueron recientemente entregados al departamento de Estado, pero los republicanos dicen que no existe ninguna garantía de que todos los mensajes importantes hayan sido transmitidos para su conservación.
La ley estadounidense obliga a conservar en los Archivos Nacionales toda correspondencia profesional de funcionarios del gobierno. Desde 2014, cualquier comunicación enviada desde una dirección privada debe también enviarse a la dirección gubernamental para su archivo.