México defenderá a sus ciudadanos en EEUU frente a las deportaciones de Trump
El Gobierno de México se está movilizando para defender a sus ciudadanos en Estados Unidos frente a las deportaciones masivas anunciadas por el presidente Donald Trump en plena implementación del plan migratorio acordado entre ambos países.
El secretario mexicano de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, informó este lunes que los 50 consulados de México en Estados Unidos están evaluando "todos los medios legales" para proteger a los mexicanos frente a estas deportaciones.
"Hay muchas vías legales diferentes pero podría decir, sin temor a equivocarme, que estamos listos para defender de forma eficaz a los mexicanos en todo el territorio de Estados Unidos", expresó en rueda de prensa en Palacio Nacional.
Además, Ebrard anunció que, si Trump cumple con su amenaza, viajará a Estados Unidos para coordinar la respuesta de México a estas deportaciones: "Voy a ir para encabezar la defensa de nuestros connacionales en Estados Unidos".
El canciller estuvo este domingo en el consulado mexicano en Los Ángeles, el mas grande que tiene México en Estados Unidos, donde revisó los trabajos que el cuerpo consular realiza sobre este asunto.
Trump anunció a fines de junio que después del 4 de julio, cuando se conmemoró la independencia de Estados Unidos, iniciarían las redadas.
"Si hay deportaciones, allí estaremos", reiteró Ebrard, quien tiene el encargo del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, de contener todas las crisis que se abren con el Gobierno estadounidense.
Fue el mismo Marcelo Ebrard quien a principios de junio lideró las negociaciones de México con Estados Unidos para evitar que Trump cumpliera su amenaza de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas.
El resultado de esa negociación fue un acuerdo migratorio por el cual México se comprometió a endurecer sus controles, desplegar más seguridad en la frontera con Guatemala y albergar en su territorio a aquellos migrantes que piden asilo a Estados Unidos.
Mientras Trump anuncia ahora deportaciones masivas, el Gobierno mexicano sigue implementando ese acuerdo migratorio, confirmó este lunes Ebrard.
El canciller informó que el despliegue de un nuevo cuerpo de seguridad en la frontera sur para frenar a los migrantes centroamericanos "ya ocurrió, ya está completado y están trabajando ya como estaba previsto".
Además, dijo que el personal del Instituto Nacional de Migración (Inami) está intensificando la búsqueda de migrantes que entraron de forma irregular porque "la ley mexicana no prevé que haya personas sin registro o sin notificar a la autoridad migratoria" en el territorio.
Asimismo, informó que en la frontera norte, hay 16 albergues para hospedar a los migrantes que esperan asilo en Estados Unidos.
Mientras permanecen en México, tienen derecho a trabajar en uno de los 3.700 puestos de trabajo ofrecidos por la industria mexicana y que ya están ocupando 327 personas.
A pesar de todas estas medidas, el secretario puso el acento en la necesidad de atacar las causas que provocan la migración forzada, como la pobreza y la violencia en Centroamérica.
En ese sentido, reivindicó el plan del Gobierno mexicano que invertirá este año 100 millones de dólares para generar puestos de trabajo en el Triángulo Norte de Centroamérica.
Un equipo técnico de México se encuentra en El Salvador para implementar el programa "Sembrando Vida", un plan mexicano que prevé crear miles de empleos a través de la reforestación del territorio.
Ebrard explicó que este plan también se extenderá a Honduras, cuyo presidente, Juan Orlando Hernández, viajará este mes a México para abordar la crisis migratoria.
Finalmente, el canciller se congratuló por el hecho de que el G20 incluyó en su acuerdo de la cumbre de Osaka un punto planteado por México que establece la necesidad de "abordar las causas profundas del desplazamiento" de personas.
"Nosotros lo vemos como un avance muy importante de la tesis mexicana, ningún otro país lo planteó en la cumbre", expresó.