Bolsonaro dice que Brasil no merece ser gobernado desde la cárcel
El diputado ultraderechista Jair Bolsonaro, candidato que lidera los sondeos de intención de voto para las elecciones presidenciales del domingo en Brasil, afirmó hoy que el país no merece ser gobernado desde la prisión, en una clara referencia al encarcelado expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
"Nuestro país no merece ser gobernado desde dentro de la cárcel o por sus ahijados políticos disfrazados como opciones, pero con la misma esencia que nos destruye", aseguró el polémico candidato en un mensaje que publicó este miércoles en su cuenta en Twitter.
Bolsonaro es el favorito según las encuestas, con el 32 % de las simpatías, por delante del socialista Fernando Haddad, con 21 %, que fue el escogido por el propio Lula como su sucesor como candidato del
Partido de los Trabajadores (PT) para las presidenciales del domingo.
De acuerdo con las encuestas, como ningún candidato conseguirá el domingo más de la mitad de los votos, Bolsonaro y Haddad tendrán que medirse en una segunda vuelta el 28 de octubre, en la que aparecen técnicamente empatados en intención de voto.
Haddad asumió como candidato el mes pasado luego de que la Justicia electoral inhabilitara a Lula por estar preso y purgando una condena de 12 años por corrupción ya confirmada en segunda instancia.
En su mensaje en Twitter de este miércoles, el ultraderechista, un defensor de la dictadura militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985 y polémico por sus declaraciones de tinte machista, racista y homófobo, recordó los escándalos de corrupción en los gobiernos del PT, principalmente el destapado por la operación Lava Jato, que descubrió gigantescos desvíos en la petrolera estatal Petrobras.
"No permitamos que controlen los medios y la internet y que le pongan fin a la Lava Jato", agregó Bolsonaro en referencia a un antiguo proyecto de Lula y de sus aliados para regular los medios de comunicación.
"Vamos a juntarnos para impedir que destruyan Brasil", agregó en un mensaje en el que destacó su condición de símbolo "anti PT", que le ha ayudado a atraer a millones de seguidores.
Según una encuesta divulgada el martes por la firma Datafolha, el 51 % de los brasileños considera que Lula debe permanecer preso, un 8 % cree que tendría que seguir condenado pero en prisión domiciliaria y tan sólo un 37 % defiende su liberación.
Entre los electores de Bolsonaro, un 82 % piden que el exjefe de Estado permanezca en la cárcel, mientras que el 78 % de quienes pretenden votar en Haddad defiende su liberación.
El exgobernante, considerado el político más carismático en la historia de Brasil, fue condenado a 12 años y 1 mes de prisión por un tribunal de segunda instancia, que dio como probado que recibió un apartamento de playa como soborno por haber tolerado los desvíos en Petrobras.