Brenes: Gobierno mandó señal equivocada con Barro Blanco

El economista, Roberto Brenes, de la Bolsa de Valores de Panamá, opina que el Gobierno debió permitir que continuara la construcción del proyecto hidroeléctrico de Barro Blanco y seguir negociando.

Con paralizar el proyecto y casi apoderarse de la negociación, el gobierno, a juicio de Brenes, mandó una señal equivocada y fue la gota que rebasó la copa, para que el Consejo Nacional de la Empresa Privada-CoNEP- expresara que las acciones gubernamentales están lesionando la seguridad jurídica.

"Hay un problema que me preocupa es una ley que le da jurisdicción coactiva a cualquier funcionario en el Gobierno", dijo Brenes, para secuestrar una obra si no le gustó y al contratante el único que recurso que le queda es ir a la Sala Tercera de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia.

SEÑALES DE DESACELERACIÓN

Ante un sondeo en Calidonia el cual refleja que los ciudadanos sienten que el dinero no les alcanza, Brenes concluyó en que nunca los oye decir que la plata les alcanza, por lo que estima que estees un tema recurrente, pero admite que hay indicios de desaceleración de la economía.

Brenes afirmó no querer que el Gobierno deje de hacer para redimir la justicia. Añadió que si el contralor general se toma su tiempo para revisar contratos, bien sea, pero que se libere a los Ministerios de esa tarea.

"Si Varela quiere crecimiento sin deuda, requiere inversión privada y directa", concluyó Brenes.

Aunque admite que parte importante de que se paralicen las obras, es responsabilidad de las alcaldías.

"Yo creo que el problema está alrededor de todo lo que está pasando, más que alrededor del Gobierno(central), de las alcaldías, donde demoran los permisos de construcción".

Ante esto, Brenes considera que hay que reestructurar al Gobierno, porque con los cambios de administración, hay que hacer nuevamente todo el trámite, como por ejemplo ir a la ANATI, la Autoridad Nacional de Tierras, a pedir permiso nuevo porque quien era director al momento de empezar las diligencias, dejó de serlo y su firma ya no vale.

El empresario también considera un error del Gobierno designar a personas ( solo por ser copartidarias) en puestos claves, donde no tienen idea de lo que van a hacer.