Ocho personas ya han recibido la vacuna de estudio contra la COVID-19 en Panamá

El infectólogo Xavier Sáez-Llorens, explicó sobre los avances que se han dado en la segunda fase de los estudios para la creación de una vacuna contra la COVID-19, que se desarrollan en Panamá.

Desde el pasado miércoles 30 de septiembre a la fecha, ya se ha aplicado la vacuna a 8 voluntarios, y según el médico, todo ha ido bien en esas personas, quienes no han manifestado ningún tipo de efectos adversos, solo un poco de molestia en el área de la inyección.

En los próximos días se aumentará el número de participantes, luego de que se hagan los primeros análisis de las muestras que se han enviado, tanto de Panamá, como de Perú donde también se hacen estudios de la misma vacuna.

Entre Panamá y Perú, participan 690 personas en el estudio que demora 13 meses en su totalidad.

“Esperamos que esta vacuna resulte segura y efectiva al igual que muchas otras que, incluso están más adelantadas que esta”, expresó el especialista.

Los resultados preliminares iniciales son analizados por un grupo independiente de expertos y darán informes luego de haber iniciado el estudio para decirle a la compañía si la vacuna está superando la fase y si está generando inmunidad en las personas que participan.

Con esa información, la compañía pasaría a la fase 3, entre los meses de noviembre o diciembre.

Sáez-Llorens detalla que el diseño de un estudio en fase 2 implica que algún porcentaje de las personas que participan no les toca la vacuna del estudio, sino una vacuna comparadora para analizar las diferencias. En este caso, a 9 de cada 10 personas le toca la vacuna de la compañía alemana de biotecnología CureVac AG. Mientras que a 1 de cada le toca la vacuna comparadora. A quienes no les toca la vacuna del estudio y resulte efectiva, la compañía se ha comprometido a dársela de manera gratuita.

Son dos dosis de vacuna que se aplican, una el día en el que se recluta al voluntario y un mes después se le aplica la segunda dosis. Hay un subgrupo, al que se le va a poner un refuerzo seis meses después.

Para el estudio se están buscando voluntarios sanos, pero si hay alguna persona con alguna enfermedad como la hipertensión, pero bien controlada, podría entrar en el estudio. Tampoco pueden participar del estudio las personas que tienen diagnóstico de COVID-19, pero se hacen pruebas serológicas antes de empezar.

Si alguna persona tuvo el virus de manera asintomática sin saberlo, sí entra en el estudio.