Carolina no es "la chiquilla" que todos piensan
Atención a las palabras de Carolina. Si creían que la niña era una inmadura, se están equivocando. La más pequeña de la casa, demuestra que entiende el juego, sabe cómo jugarlo y además maneja su propia estrategia. Quizás su comportamiento y la forma en la que se maneja dentro de la casa, es su mejor arma para confundir a las personas y terminar apoderándose de la situación.