Tim Duncan preferió retirarse sin bombos ni platillos
Fiel a su personalidad
Ni el momento de la despedida, que la mayoría de las grandes figuras lo convierten en el más egocentrista de su la carrera profesional para recrearse aun más en el ego que siempre los acompañó, pudo cambiar la sencillez, naturalidad y humildad de una leyenda como lo es Tim Duncan.
El ya exjugador franquicia de los Spurs de San Antonio durante las pasadas 19 temporadas, si quiso decir adiós a toda la familia de la NBA y en especial a los seguidores del equipo tejano para agradecerles las enormes muestras de cariño que le profesaron y darles la verdadera razón de su retirada.
Duncan, que primero, a través de un escueto comunicado oficial de los Spurs dio a conocer su retirada, luego quiso profundizar en el origen de la decisión y todo lo que había significado su trayectoria profesional y para eso nada mejor que sentarse a conversar con un amigo y abrir el corazón.
Eso fue lo que hizo Duncan dos días después de haber oficializado la retirada en una conversación que mantuvo con su amigo Rashidi Clenance y trasmitida a través de la página de internet "ViVid Streaming".
"No hubo nada especial, simplemente que siempre había dicho que cuando el estar en un campo de baloncesto no fuese divertido para mi, entonces me iría y eso fue lo que sucedió", comentó Duncan al romper el silencio sobre su marcha de la actividad profesional. "Ya no lo disfrutaba tanto".
Lo elogios generalizados dentro del mundo de la NBA al convertirlo en el mejor ala-pívot que haya visto la liga, cinco veces campeón y un compañero sin igual, cuya generosidad y determinación sirvieron como la columna vertebral para la historia de éxito más duradero en los deportes estadounidenses durante las últimas dos décadas, los consideró "excesivos".
Duncan intentó eludir la mayoría de los elogios, viendo el tributo de su excompañero Bruce Bowen en la cadena ESPN y la emotiva conferencia de prensa del entrenador Gregg Popovich el martes.
"Casi me rompo con esa", declaró Duncan, que reconoció que mientras en la televisión estaba su despedida el veía el canal de "Discover" de sus hijos.
"No esperaba la respuesta que recibí", admitió Duncan. "No, no lo esperaba. Pero así es como soy. Sabía que no quería estar ahí sentado y ver lo que se decía. Se agradece, pero no quería verlo".
Duncan lució relajado al momento de hacer la entrevista, sentado en una mesa con una camiseta verde con la imagen suya y del escolta argentino Manu Ginóbili, al que le tiene una gran admiración tanto profesional como personal.
El exjugador de los Spurs destacó que no tiene planes inmediatos para la próxima etapa de su vida, y es así como lo desea en el futuro.
"Es lo mejor. No hay un guión", admitió Duncan. "Por primera vez en más de 20 años, no lo tengo. No hay un lugar al que tenga que ir o algo que hacer. Así que disfrutaré aún más a mi hijo Draven y a mi hija Sydney. Fuera de eso, también podré vivir un poco más".
Duncan durante muchos años ha sido propietario de un negocio de personalización de automóviles en San Antonio, que espera consolidar de cara al futuro.
El exjugador de los Spurs restó importancia a su carrera en varias ocasiones durante la entrevista, algo consistente con su humilde personalidad que desplegó desde que fuera la primera selección en el sorteo universitario de 1997 tras formarse en la de Wake Forest.
"Realmente no me importan las estadísticas ni nada de eso, como son las comparaciones con otras leyendas", comentó. "Estoy en la la actualidad y la valoración por parte de otros profesional y por mí está bien. Eso es mucho más de lo que jamás pensé que sería. Tan solo eso es un honor".
Duncan también les escribió una carta a los aficionados de los Spurs que fue publicada en el sitio web del equipo y admitió que se sorprendió con todas las respuestas en los últimos días.
"Afortunadamente no me estoy muriendo", bromeó. "Solo paso al siguiente capítulo, que estoy convencido que será interesante y válido para mi y mi familia".
A pesar que Duncan intentó evitar al máximo la emotividad durante la charla-entrevista con su amigo Clenance, al final la misma hizo acto de presencia cuando reiteró que había disfrutado de todos los momentos, los buenos y los malos, y por eso mismo sólo tenía una palabra para cerrar el "paquete" de su trayectoria profesional y que no podía ser otra que la de "gracias".
"Me quedo con lo divertido de mi recorrido por el mundo del baloncesto profesional, que disfruté al máximo, pero ya es un capítulo cerrado de mi vida y ahora esto y convencido que el próximo lo será aun más", agregó Duncan.