Suspendido jefe de seguridad de selección uruguaya se defiende de denuncia de tortura
Se pronunció ante las acusaciones en su contra
El suspendido jefe de seguridad de la selección de fútbol de Uruguay, Miguel Zuluaga, se defendió este viernes de acusaciones de tortura durante la dictadura militar (1973-1985).
Zuluaga fue suspendido la semana pasada de sus funciones en el plantel celeste que viajará a Rusia-2018 y no estará en el Mundial, por decisión de la directiva de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), luego de que organizaciones de derechos humanos lo señalaran como integrante policial de la Dirección Nacional de Inteligencia en los años 70.
"En todos los años que estuve en inteligencia, ni torturé ni vi torturar a nadie", sostuvo este viernes Zuluaga a la local radio Océano FM. "Yo jamas torturé a nadie ni fui violento con un detenido", enfatizó.
"El derecho del los detenidos (...) para mí siempre fue principal", sostuvo Zuluaga quien señala haber estado en cargos administrativos.
"Me parece que todo esto es una novela (...) para perjudicarme y si tuviera (el grupo denunciante) alguna prueba contra mí (...) hubiera ido a donde tenía que ir que es la Justicia", añadió el policía retirado.
A fines de abril, organizacione de derechos humanos dijeron al diario El País que presentaron a la AUF "documentos que certifican que él (Zuluaga) estuvo en el aparato represivo bajo el terrorismo de Estado. El trabajó en la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia, que el Estado uruguayo reconoció que fue un centro de detención y de tortura. El firmó interrogatorios como subcomisario".
El caso llega a pocos días de la partida de Uruguay hacia Rusia y los jugadores, que ya entrenan para la justa mundialista, se han limitado a señalar que la separación del cargo del jefe de seguridad es una decisión "institucional".