Al Hussein: "Soy el único comprometido con el nuevo liderazgo"
Elecciones FIFA
El jordano Ali Bin Al Hussein pidió hoy el respaldo del Congreso de la FIFA, ante el que se definió como "el único candidato que ha demostrado que está comprometido con un nuevo liderazgo", y apostó por "una FIFA en la que no exista corrupción y trate a sus miembros de manera equitativa".
"Vamos a aprender del pasado. Hemos dado un paso en la dirección adecuada con las reformas, pero tenemos que ponernos de acuerdo. Me he comprometido a traer a la FIFA a personas que están fuera de toda duda y que nos van a ayudar", dijo durante los 15 minutos de que disponen los cinco candidatos para dirigirse al Congreso antes de la votación.
El príncipe Ali, el único rival de Joseph Blatter en las elecciones del pasado mayo en las que el suizo fue reelegido, insistió en que si es presidente defenderá a todas las regiones, "no a una sola", y no hará prevalecer "las necesidades de los que tienen más contra las de los que tienen menos".
"El fútbol florece pero la FIFA se ha quedado atrás, el mundo exterior ya ha hablado. Políticos y fiscales están luchando para acabar con la corrupción. El mundo está cambiando y ustedes pueden acabar con esta crisis de liderazgo. Es crítico que tomemos las decisiones correctas. Pueden crear una nueva FIFA. Ha llegado el momento de que den los primeros pasos hacia la libertad y la fuerza", añadió.
El presidente de la federación jordana apostó por "recuperar la credibilidad juntos y por "edificar la FIFA que el fútbol merece".
"Hay más de 1.300 millones de personas que aman a nuestro deporte. Es el más fuerte del mundo, la fuerza unificadora más importante. El fútbol da sentido a nuestra vida y da vida a personas en campos de refugiados. Une a personas desde África a Río", agregó.
Al Hussein apuntó que el fútbol "lleva la paz, ayuda a niñas a liberarse de los estereotipos de género".
"Es el deporte que más se practica. El Mundial de 2014 generó récord de ganancias y el fútbol femenino es el que más potencial tiene", concluyó.