Biglia rompe el silencio y habla de Messi y la final: "Estaba destrozado, con un llanto sin consuelo"

El volante contó la intimidad del vestuario tras la final perdida con Chile y desestimó la posibilidad de una renuncia de Leo.

Lionel Messi lo tiene todo. Es amado en todo el mundo y rompe records cada fin de semana con Barcelona. Sin embargo, el título con Argentina se le mantiene esquivo y, tras la final de la Copa América perdida con Chile, se habló de la posibilidad de que renunciara. Su compañero en la Selección Lucas Biglia desestimó esa posibilidad: "De ninguna manera puede dejar la Selección", afirmó. Lo que sí aceptó fue que Leo decida tomarse un descanso, y aclaró que en esa decisión "muchos jugadores lo van a apoyar".

El futbolista de la Lazio de Italia, compañero del rosarino desde hace una década cuando se consagró campeón mundial juvenil en Holanda 2005, admitió que "nunca" vio a Messi con un estado de ánimo tan golpeado como el que mostró tras aquella final. "Fue feísimo ver a Leo, que es el mejor jugador del mundo, de esa manera. Estaba destrozado, con un llanto sin consuelo. Nunca lo había visto así", rememoró Biglia.

Profundamente dolido por las críticas que recibieron tras la derrota con Chile, a Biglia lo que más le cuesta aceptar es la dura arremetida contra Messi. "¿Por qué en Argentina no podemos disfrutar de tener al mejor del mundo y no sabemos cuidarlo como lo hacen en Barcelona?", se lamentó en una entrevista con TyC Sports.

El volante central dimensionó como "un dolor muy grande" la frustración de una nueva final perdida a menos de un año del subcampeonato del mundo en Brasil y confesó que Javier Mascherano, referente del plantel, dijo 'hasta acá llegué' después de la caída en los penales con los chilenos. "Fue una calentura del momento", aclaró.

Además, el ex jugador de Argentinos e Independiente confesó que no puede salir de su casa desde que volvió de Chile. "No lo hago para no cruzarme con alguien que pueda decir algo, de mi o algún compañeros, y no caiga bien. A uno le corre sangre", dijo. Y agregó: "Queríamos ganar la final, sabíamos lo que significaba para nuestro pueblo ese partido, por eso tanto dolor. Va más allá del resultado futbolístico, nosotros escuchamos todo lo que se habló en relación al partido y a la historia de los dos países, no estuvimos ajenos a todo eso".

Pero esa razón, Biglia reconoció que se trató de un golpe mayor a la final perdida el año pasado en Brasil. "El consuelo del Mundial fue saber que perdimos contra una gran selección como Alemania y que llegábamos de un desgaste muy grande contra Holanda en semifinales", concluyó.