Levante le pegó al crecido Villarreal

Un buen Levante aprovechó su superioridad numérica para dominar y vencer por 1-0 a un Villarreal que se defendió con todo ante un rival que contó con un jugador más desde el minuto 36, tras la expulsión de Jokic.

La expulsión marcó por completo el partido, ya que desde ese momento el Levante se hizo con el dominio territorial y arrinconó a un Villarreal que aguantó con orden defensivo las embestidas de su rival hasta que a falta de siete minutos para el final, un gol de Deyverson dio la vitoria a los locales.

Los primeros minutos del duelo entre el colista y el líder de Primera estuvieron marcados por las excesivas imprecisiones en ambos bandos, que buscaban un juego muy directo y sin apenas contar con el centro del campo.

Sin apenas ocasiones de gol claras de los dos equipos, lo más destacable de la primera media hora de juego fue una internada del levantinista Roger, que le robó el balón a Víctor Ruiz en una zona peligrosa, pero el guardameta Areola evitó el primer gol del partido con una buena intervención.

Una acción de Jokic sobre Iván López en el minuto 35 cambió la decoración del partido, ya que el villarrealense fue expulsado al ver la segunda amarilla por entrar sobre el jugador levantinista con las dos piernas por delante, lo que obligó al lateral a abandonar el terreno de juego lesionado.

Ante este contratiempo, Marcelino García Toral movió ficha y dio entrada al defensa Jaume Costa por un hombre de ataque como Nahuel Leiva, mientras que en las filas locales entró Camarasa por el lesionado Iván López.

La superioridad numérica dio alas al Levante, que se volcó sobre la portería de Areola, que tuvo que emplearse a fondo ante las ocasiones de Roger, por dos veces, Lerma y Feddal, si bien al descanso se llegó con la igualada sin goles.

En la reanudación el Levante arrinconó al Villarreal en su área, aunque el equipo de Marcelino hizo gala de su buen hacer defensivo e incluso intentó alguna contra con la que sorprender a los locales.

Pese a su claro dominio, el equipo de Lucas Alcaraz no lograba encontrar una brecha en la defensa del Villarreal, que con mucho sufrimiento aguantaba en inferioridad las embestidas locales con un acertado Areola.

El asedio del Levante se incrementaba con el paso de los minutos ante un Villarreal pertrechado atrás que apenas protagonizó tímidas acciones ofensivas que no llegaron a poner en aprietos a la meta defendida por Rubén en ningún momento.

Finalmente, la presión local logró tumbar el muro visitante en el minuto 83 tras un centro de Ghilas desde la izquierda que fue aprovechado por Deyverson para batir desde dentro del área a Areola.

En los últimos instantes del partido, el Villarreal intentó aproximarse a la meta levantinista, pero sin acierto en los metros finales.