Las dominicanas se chocan en la pared de Rusia
La República Dominicana se chocó hoy en la pared de Rusia, uno de los equipos más fuertes de su grupo, y perdió su segundo partido seguido en el torneo olímpico de voleibol de Londres 2012 por 3-1, aunque todavía conserva intactas sus aspiraciones de pasar a octavos. Rusia fue absolutamente infranqueable en el bloqueo, con sus gigantes de dos metros, como Ekaterina Gamova, y realizó un partido correcto en todos los aspectos, que le permitió situarse en la cabeza del Grupo A, con dos victorias. La firmeza rusa, que sumó 18 puntos de bloqueo, fue desgastando poco a poco la moral de la República Dominicana, una selección muy joven, con una media que supera por poco los 23 años, y que sufrió anímicamente cuando sus remates no conseguían sobrepasar la red. El equipo dominicano es voluntarioso, tiene una cualidad innegable y cuenta con Bethania de la Cruz, una jugadora de primera fila mundial, que siempre aparece con un remate devastador o con un bloqueo firme. Pero la mayoría de los ataques de las dominicanas terminan siempre en las manos de De la Cruz y ahí reside uno de los mayores problemas del equipo, puesto que cuando las oponentes descubren cómo pararla, el país caribeño comienza a ceder puntos a raudales. Rusia, candidata a luchar por el bronce, tuvo bastantes dificultades en contener a De la Cruz en el arranque del partido, lo que se reflejó en el marcador ajustado, de 25-23 en el primer set. En el segundo período el equipo eslavo colocó a Gamova enfrente de la principal rematadora dominicana y logró su objetivo, De la Cruz se chocó una y otra vez con la barrera. En seguida Rusia había abierto nueve puntos de ventaja, la República Dominicana no tuvo capacidad mental para reponerse y cedió el parcial por diez puntos, 25-15. La historia fue bien distinta a partir del tercer set, cuando la República Dominicana tuvo sus mejores momentos, diversificó el juego por una intensa labor de pasadoras como Cándida Arias y de Karla Echenique. Arias, Milagros Cabral, la capitana, y De la Cruz pudieron por primera vez superar el bloqueo de Gamova y lograron inclinar la balanza de su lado, en una disputa intensa, en la que ninguna selección consiguió escaparse en el marcador y acabó 26-24 para las dominicanas. El equilibrio de fuerzas prosiguió hasta bien avanzado el cuarto set, pero entonces Rusia abrió cuatro puntos de distancia con un par de remates de Perepelkina y un fallo de sus rivales. Aunque las dominicanas consiguieron volver a acercarse, ya no conseguirían levantar el resultado y cayeron por 25-22.