Djokovic, cerca de firmar la mejor temporada de la historia
La temporada 2010 de Nadal o la 1974 de Jimmy Connors también son excepcionales.
Con diez torneos, 14 finales (otro récord), 78 victorias y tan solo 5 derrotas, las cifras del número uno del mundo se pueden comparar con las de los mejores tenistas de todos los tiempos.
Tras haberse convertido en el primer tenista de la historia que suma seis Masters 1.000 y tres Grand Slam y haber dominado con soltura la temporada 2015, al serbio Novak Djokovic solo se le puede comparar con el pasado.
Por eso, a la espera de que en Londres pueda sumar su quinto Torneo de Maestros, el cuarto consecutivo, ya son muchos quienes se preguntan si la que está firmando el serbio no es la mejor temporada de todos los tiempos.
Con diez torneos, 14 finales (otro récord), 78 victorias y tan solo 5 derrotas, las cifras del número uno del mundo se pueden comparar con las de los mejores tenistas de todos los tiempos.
Mejoró el 2011. Entonces también sumó tres Grand Slam (todos menos Roland Garros, que todavía no ha ganado nunca) y levantó 10 trofeos (este año puede conseguir once).
Aquel año ganó 70 partidos y perdió seis. Si gana el Torneo de Maestros de Londres, esta temporada la acabará con 83 victorias y cinco derrotas, lo que supondrá más del 94 % de triunfos.
La comparación porcentual le iguala con la que obtuvo Federer en 2006, cuando acabó el año con 92 triunfos y cinco derrotas.
El español también tiene un año que presentar como candidato al mejor de la historia: 2010, cuando al fin logró destronar a Federer de su trono de Wimbledon. Nadal sumó entonces 3 Grand Slam (fue cuartofinalista en Australia) y un total de 7 títulos, conseguidos gracias a sus 71 victorias, por solo 10 derrotas.
Pese a que las estadísticas son inferiores, Mats Wilander considera esa temporada del español como la mejor de la historia.
"Ganó tres Grand Slam en cuatro meses y en tres superficies diferentes. Además, ese año ganó todos sus partidos sobre tierra batida. Es algo extraordinario", asegura el exjugador.
Remover más atrás en la historia tiene sus riesgos porque el circuito estaba menos organizado, lo que hacía que los mejores coincidieran en menos torneos, mientras que ahora todos ellos están obligados a participar en los Masters 1.000.
Pese a todo, en la memoria está el gran año que John McEnroe logró en 1984, con 13 títulos, dos de ellos de Grand Slam. El estadounidense ganó 82 partidos, perdió 3, un récord, y ninguno de ellos contra rivales del "top 10", a quienes se midió en 12 ocasiones.
Diez años antes, Jimmy Connors llevó hasta sus vitrinas 15 trofeos, tres de ellos del Grand Slam (estuvo ausente en Roland Garros).
El estadounidense, además, sumó 93 triunfos, un récord, y solo concedió 4 derrotas.