¿Cuánto cuesta carnavalear?

Panamá/Después de dos años de sequía carnavalera, se enciende la euforia en la víspera de esta fiesta y si en tiempos normales los panameños hacen de todo para ir al carnaval, seguramente este año el reto será mayor para conseguir el dinero suficiente,

Debido a la situación económica que atravesamos, hasta donde están dispuestos a llegar los panameños para ir al carnaval.

Definitivamente es la fiesta de mayor arraigo entre los panameños y este año no hay motivos para hacer la excepción.

Las emisoras y sus DJ contribuyen a crear el ambiente y animar hasta a los indecisos, y la retroalimentación es positiva, se iniciaron los preparativos.

La pandemia del covid-19 ha cedido y las autoridades han dado su aval para que suenen las murgas y comparsas, y la gente se vuelque a los culecos.

Por los panameños, es el momento preciso para el jolgorio y el desenfreno, o solo relajarse, olvidar la rutina y los problemas, hasta el miércoles de cenizas.

 Sin embargo, el gran reto es el problema económico que golpea el bolsillo de todos, aunque los panameños ya tienen sus métodos para garantizar su carnaval. 

Pero ¿la pregunta es, a pesar de los malos tiempos financieros, hasta dónde están dispuestos a llegar los panameños para ir al carnaval? 

Empeñan hasta la cama de los niños, en esta casa de empeño aseguran que la mitad de lo empeñado nunca se recupera, se queda en este establecimiento.

Preciados artículos o dejar de pagar algunos compromisos financieros, son algunas prácticas comunes en la víspera del carnaval, con la promesa de que después de la fiesta se saldarán esas deudas.

Tras la pandemia, también hubo cambios en los costos, hoy día carnavalear cuesta mucho más, y es que subió el precio del combustible y la comida, igual que el alquiler de casas en el interior de la república, en Las Tablas por ejemplo, hay hasta 1,500 dólares y más según anuncios en internet, aunque los jóvenes especialmente, ya saben cómo organizarse para abaratar costos.

Curiosamente, estas organizaciones para la parranda también tienen sus códigos y reglamentos

A semana y media de que inicie la farsa y alegoría del carnaval las casas de empeño se preparan para lo que ellos estiman será una avalancha de clientes, según otras versiones el movimiento también se incrementa en algunos bancos de sangre. 

A pesar de su situación económica, hágalo sin evadir sus compromisos financieros, con todo listo para la escuela de sus hijos, no viva este carnaval como una celebración de ensueño, que al final se le pueda convertir en una pesadilla.