Meghan lloró al saber que su padre no iría a su boda con el príncipe Enrique
Thomas Markle, padre de la duquesa de Sussex, reveló hoy que su hija lloró cuando le dijo que no acudiría a su boda con el príncipe Enrique de Inglaterra, celebrada el pasado 19 de mayo en el castillo de Windsor, a las afueras de Londres.
"Lo desafortunado para mi es que soy una nota al pie de página de uno de los mayores momentos de la historia en lugar de un padre que ha llevado a su hija al altar. Me molesta un poco", declaró Markle desde Estados Unidos a la cadena británica ITV.
Según explicó al programa "Good Morning Britain" de ITV, Markle le comunicó a su hija la decisión en una conversación telefónica con ella y el príncipe Enrique, duque de Sussex.
"Estaban decepcionados...y los dos dijeron: Cuídate, estamos muy preocupados por ti", agregó Thomas Markle.
El padre afirmó que vio el enlace real desde un "B&B" (Bread & Breakfast, alojamiento asequible) en Estados Unidos tras ser sometido a una intervención quirúrgica, y reconoció su decepción por no haber acompañado a su hija hasta el altar.
Ante la noticia de que el padre no estaría en Windsor, la casa real británica comunicó poco antes del enlace que el príncipe Carlos, heredero de la corona británica, acompañaría a Meghan hasta el altar en la capilla de San Jorge de Windsor.
Hoy, el padre de la duquesa reconoció que sintió "celos" pero que estaba "honrado".
"No puedo pensar en mejor sustituto que alguien como el príncipe Carlos. Lloré de alegría de que lo hiciera. Solo que me hubiera gustado que hubiera sido mi mano que sostuviera la suya", agregó.
Thomas Markle, de 73 años, vio por televisión la boda mientras se recuperaba de una operación de corazón, que se realizó poco después de que saliera a la luz en la prensa que había aceptado con unos "paparazzi" hacerse unas fotos.
En ese sentido, el padre dijo que le pidió disculpas a Meghan y Enrique y que se había dado cuenta de que había sido un "grave error".
Y también reveló que el nieto de la reina Isabel II le pidió la mano de su hija por teléfono.
"Enrique me pidió su mano por teléfono y yo dije: Eres un caballero, debes prometerme que nunca vas a levantarle la mano a mi hija y por supuesto te concedo mi permiso", contó Markle.
"Ella ha sido una princesa desde el momento que nació. (Así que Enrique) hizo una buena elección, ¿no?", agregó.
También reveló que estima que su hija y el príncipe Enrique van a querer tener hijos pronto.
"Desde hace tiempo que ella quiere tener hijos y cuando conoció a Enrique y habló de lo
mucho que lo quería, (entonces) tiene que haber un niño pronto", agregó.
Además, Markle dijo que habló con el duque de Sussex sobre política y sobre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"Yo me quejaba de que no me gusta Donald Trump y él dijo: 'darle a Donald Trump una oportunidad", resaltó.
Los duques de Sussex se casaron en medio de una gran atención mediática frente a unos 600 invitados, en su mayoría amigos y familiares y sin la presencia de políticos.