Denuncian retrocesos en la erradicación de las minas antipersonas en 2014
La erradicación de las minas antipersonas sufrió retrocesos 2014, ya que el número de víctimas y su uso por parte de grupos armados no estatales aumentó, pese a que cada vez hay más territorios libres de estas armas.
Así lo dijeron miembros de la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas (ICBL), ganadora del Nobel de la Paz 1997, al presentar su informe anual sobre minas y en vísperas del inicio de la 14º Reunión de Estados Miembros de la Convención sobre la Prohibición de las Minas Antipersonas el próximo lunes en Ginebra.
Entre octubre de 2014 y octubre pasado, se registró el mayor número de países que utilizaron minas antipersonaa o artefactos explosivos similares desde 2006.
Los grupos armados no gubernamentales (insurgentes, rebeldes o terroristas) continuaron haciendo uso de ellas en Afganistán, Colombia, Libia, Myanmar (Birmania), Pakistán, Siria y Yemen, mientras que Irak, Túnez y Ucrania aparecen como los países donde estas armas fueron utilizadas nuevamente o por primera vez en 2014.
Los únicos registros de uso de minas por parte de fuerzas gubernamentales corresponden a Birmania, Corea del Norte y Siria, que no forman parte de la convención que prohíbe el uso de las minas antipersonas.
"El nuevo uso de minas antipersonas por parte de grupos armados no estatales en conflictos como los de Ucrania y Yemen, y el uso continuado a gran escala de artefactos improvisados y activados por la propia víctima en Afganistán e Irak es particularmente preocupante", dijo el investigador de la ONG Human Rights Watch, Mark Hiznay.
De las 3.678 víctimas de minas antipersonas y otros restos de explosivos de guerras en el mundo en 2014, al menos 1.050 estaban en Afganistán.
La primera cifra supone un incremento del 12 % respecto a 2013, cuando hubo 3.308 casos, aunque se cree que el total de perjudicados el año pasado en realidad fue mayor debido a que en muchas zonas de conflicto no existen registros de víctima de este tipo de armas.
Según los datos aportados por los expertos, hubo víctimas de minas en unos 54 países, de los cuales 37 son Estados parte de la convención.
De esas víctimas, el 80 % eran civiles y el 40 % niños.
Aunque el informe celebra los 200 kilómetros cuadrados que quedaron libres de minas en 2014, frente a los 185 kilómetros cuadrados despejados en 2013, quedan 57 países con esos artefactos sembrados en sus tierras.
Las áreas afectadas incluyen territorios en Kosovo, Somalilandia (Somalia), Nagorno Karabaj (Azerbaiyán) y el Sáhara Occidental.
Como resultado positivo se destacó que a pesar de que persiste un alto número de víctimas, la cifra se mantiene en su segundo nivel más bajo desde 1999, cuando se inició el registro.
Entonces, el promedio de víctimas diarias era de 25, mientras que en 2014 fue de 10.
Los Estados de la convención han destruido 49 millones de minas que tenían en reserva, de las que 530.000 lo fueron en 2014.
Finlandia completó el año pasado la destrucción completa de sus arsenales y se espera que 9 millones de minas adicionales sean destruidas por otros seis Estados en el futuro próximo.
Aún así, desde la ICBL destacaron que "aún queda mucho trabajo por hacer", ya que Estados participantes como Bielorrusia, Grecia o Ucrania violan actualmente la convención.
Esos tres países debían haber completado la destrucción de sus arsenales entre 2008 y 2011, pero no lo han hecho.
Los Estados y áreas afectadas recibieron 417 millones de dólares en asistencia internacional el año pasado, 23 millones menos que en 2013.