Surgen reacciones tras conocerse que espionaje telefónico alcanzó a Ayú Prado

Miembros de la sociedad civil y víctimas de los llamados ‘pinchazos telefónicos’, reaccionaron ante las revelaciones que hizo TVN Noticias, donde el entonces fiscal Superior Especializado contra la Delincuencia Organizada en el Ministerio Público (MP) y actual presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), José Ayú Prado, también fue interceptado telefónicamente, por el Consejo de Seguridad y Defensa Nacional, durante el gobierno del expresidente Ricardo Martinelli.

En esa época, Ayú Prado, era el responsable de investigar al expresidente de la República, Ernesto Pérez Balladares, quien en septiembre de 2009 había sido acusado de blanqueo de capitales por supuestamente haber recibido sumas de dinero de la empresa Lucky Games, S.A., a cambio de una concesión para explotar salas de máquinas tragamonedas en 1996.

Para el exdirigente de la Cruzada Civilista durante la dictadura militar, Aurelio Barría, “no sorprende las irregularidades cometidas bajo la administración del exmandatario Martinelli”.

El presidente Martinelli, pudo haber estado pinchando hasta su propia esposa, eso a mí no me sorprende y eso es violentar la privacidad de todos los ciudadanos”.

Por su parte, Carlos Vásquez, expresidente del Colegio Nacional de Abogados, señaló que “la actuación del Ministerio Público, determinará la gravedad de estas acusaciones y como sociedad tenemos que plantearnos penas más enérgicas en esta materia”.

La dirigente por el Partido Revolucionario Democrático (PRD), Balbina Herrera, manifestó, “no me extraña saber que su propia gente que lo ayudaba a hacer sus cosas, también los estaban pinchado”.

En la actualidad a Martinelli se le sigue un voluminoso expediente en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) por supuestas escuchas telefónicas ilegales. Este caso inició el pasado 13 de agosto cuando la CSJ admitió investigarlo y el 9 de octubre pasado el magistrado fiscal, Harry Díaz, presentó una formulación de la acusación en la que sustentó que existen suficientes pruebas de la responsabilidad del expresidente en este caso.

Díaz solicitó condenas que suman al menos 21 años de prisión por los delitos de inviolabilidad del secreto y derecho a la intimidad, peculado por malversación y peculado de uso.

Esta acusación debe avalarse o rechazarse por parte del magistrado juez de Garantías, Jerónimo Mejía, el próximo 11 de diciembre a las 9:00 a.m. en la audiencia fijada contra el expresidente Martinelli.