Vendedores protestan en carnaval de la Cinta Costera; autoridades reaccionan
Inconformes por la ubicación dada por la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP) para la instalación de sus puestos de venta, comerciantes ambulantes protestaron este lunes 24 de febrero, en la entrada de los culecos.
Con su acción, los manifestantes no dejaban ni entrar ni salir a nadie del área de los culecos. Denunciaron que tanto el sábado como el domingo, no se les permitió ubicarse cerca de las tarimas, sin embargo, hoy que lo volvieron a hacer, fueron removidos por la Policía Nacional, por lo que procedieron a realizar la manifestación.
Aseguran que la mala ubicación que les han dado, ha impedido que recuperen las ganancias producto de su inversión.
Además, denunciaron que algunos puestos de venta fueron otorgados a extranjeros.
En respuesta, a través de un comunicado de prensa, la ATP explicó que la ubicación de los kioscos no se realiza al azar, esta se hace en debida coordinación con los estamentos de seguridad para cumplir con las medidas de precaución y prevención que se requieren en zonas de eventos masivos; como salidas de emergencia, rutas de evacuación, entre otras.
“Los kioscos están ubicados dentro del área del desfile en la Cinta Costera, no hay competencia desleal como algunos propietarios indican, solo se encuentran los 70 puestos que fueron otorgados mediante tómbola pública en presencia de los participantes el pasado 3 de diciembre del 2019 en el Centro de Convenciones Atlapa”, cita la nota de prensa.
Por otra parte, desmintieron que ninguno de los puestos les fue otorgado a algún extranjero, pues desde el día unos de la convocatoria han cumplido a cabalidad el requisito de solo otorgar puestos de venta de alimentos y refrescos a nacionales.
La ATP recordó a los dueños de los kioscos que deben cumplir con las medidas de higiene y salubridad para cuidar la salud de sus clientes, debido a que desde el día unos han recibido reportes oficiales del Minsa sobre irregularidades detectadas que pudieran afectar la salud, pero que por fortuna no han llegado a ser consumidos gracias a los constantes operativos que mantienen.
