NBA: El Thunder en calma tras desperdiciar ventaja ante los Spurs
Una arenga del entrenador de los Spurs Gregg Popovich se ha convertido en la frase más popular de esta postemporada en la NBA. "I want some nasty (Quiero que sean malos)", expresó Popovich. La consigna es irreverente y suscitó revuelo de la noche a la mañana. Y es algo que no va acorde a la fama del equipo. Los jugadores han escuchado palabras aún más altisonantes de Popovich durante pausas en los partidos. El flamante entrenador del año de la NBA soltó la frase el domingo y la misma dio fue lo despertó a los Spurs en su remontada en el último cuarto contra el Thunder de Oklahoma City. Con el triunfo sobre el Thunder, los Spurs empataron el récord de 19 victorias consecutivas en la NBA y están en ventaja con vistas al segundo partido del martes dentro de final de la Conferencia del Oeste. "Tienen que escucharlo (a Popovich), sabe prender y apagar el micrófono", señaló el lunes el alero de los Spurs Stephen Jackson. "Ustedes no escuchan las cosas que suele decir". Sin embargo, todo lo que el Thunder escuchó el lunes fueron las interrogantes en torno a su costoso derrumbe al final del encuentro. Oklahoma City comenzó el último cuarto arriba en el marcador, una hazaña nada ordinaria frente a los Spurs en los últimos 47 días, el tiempo transcurrido desde la anterior derrota de San Antonio. Si consiguen ponerse arriba 2-0, los Spurs se convertirán en el cuarto equipo que hilvana una racha de 20 victorias o más en la historia de la NBA. También quebraría el récord de la racha más larga de victorias en los playoffs, la cual los Spurs actualmente comparten con los Lakers de 2011. "Realmente no nos importa", dijo el escolta Manu Ginóbili. "Estamos cerca, a siete partidos, de completar algo que es mucho mejor que la racha", añadió el escolta argentino. (La racha) es el presente y está bien. Pero siempre estamos concentrados en el siguiente partido y lo duro que será". Esta es la primera vez que el Thunder se ve rezagado en una serie de playoffs tras quedar abajo 1-0 en la final del Oeste la pasada temporada. Respondieron con una victoria en el segundo partido en Dallas, pero luego sufrieron derrotas en los siguientes tres. El Thunder buscó explicaciones el lunes sobre su derrumbe. La principal fue una admisión del entrenador Scott Brooks, quien dijo que se equivocó al dejar en la banca al delantero español Serge Ibaka, segundo en la votación al mejor jugador defensivo de la NBA, en el cuarto período. Fue cuando los Spurs anotaron 39 puntos y acertaron 12 de sus 16 tiros al aro, luego que el Thunder había contenido a San Antonio a sólo 16 puntos en el tercero. Brooks dijo que el Thunder se derritió ante una "exhibición clásica" de Ginóbili, la primera del argentino en estos playoffs. Ginóbili sólo promediaba 11 puntos en la postemporada al comenzar la serie, pero el lunes dijo que ya era hora de recuperar su puntería. "Ayuda tener una buena noche anotado", dijo Ginóbili. "Pero no me dejo llevar por anotar 26 en un partido porque hay algo más importante que yo. Tenemos muchas armas".