MLB noticias: La sequía ofensiva marca la temporada 2025 ¿quiénes pagan el precio?
La acción del béisbol grandes ligas por TVMAX.
Panamá/La temporada 2025 de la Major League Baseball (MLB) continúa marcada por un declive ofensivo que tiene a fanáticos y analistas en alerta.
Según datos actualizados al 13 de mayo, el promedio de bateo de la liga se sitúa en .242, uno de los más bajos desde 1960, mientras que el OPS (on-base plus slugging) de .713 es de los peores en tres décadas. Aunque estas cifras muestran una leve mejora respecto al .239 y .702 reportados en abril, no son el fondo histórico —1968 (.237) y 1989 (.698) siguen siendo los peores—, pero reflejan una crisis que afecta el espectáculo del béisbol.
Equipos como los Colorado Rockies, con un récord de 6-33, son el rostro de esta sequía ofensiva, ocupando el último lugar en carreras anotadas. Su incapacidad para conectar hits llevó al despido del coach de bateo Hensley Meulens, evidenciando la desesperación en Denver.
Los Pittsburgh Pirates, pese al talento de Paul Skenes en el montículo, languidecen en el puesto 28 en jonrones y 24 en carreras, con una alineación que no logra respaldar su pitcheo. En Baltimore, los Orioles (13-22) ven a sus estrellas Gunnar Henderson y Adley Rutschman rendir por debajo de lo esperado, mientras su pitcheo, con una ERA de 6.08, agrava la situación.
Otros equipos, como los Milwaukee Brewers, Seattle Mariners, St. Louis Cardinals y Kansas City Royals, también sufren. Los Brewers, sin el poder de Willy Adames, rankean 23ro en slugging (.377). Los Mariners, limitados por problemas en el T-Mobile Park, dependen demasiado de jonrones esporádicos. En St. Louis, prospectos como Jordan Walker (.198) no despegan, y los Royals, fuera de Bobby Witt Jr., carecen de consistencia en el plato.
La raíz del problema apunta a múltiples factores. Los controversiales "bates torpedo", con cañones más pesados, dificultan el contacto, reduciendo promedios y jonrones (1.05 por juego, el menor desde 2014). El pitcheo, cada vez más sofisticado, aprovecha bolas rápidas de 94.2 mph y rompientes optimizados por tecnología, elevando los ponches al 22.7% de los turnos. Este dominio ha generado debates en plataformas como X, donde los fanáticos cuestionan si el enfoque analítico —priorizando swings ascendentes— está sacrificando el bateo de contacto.
Mientras equipos como los Dodgers y Padres resisten gracias a alineaciones profundas, la mayoría lucha por adaptarse. La MLB evalúa medidas para 2026, como regular los bates o limitar datos en tiempo real para lanzadores, pero el camino hacia la recuperación es incierto.
Jugadores como Luis Arráez (.289) destacan por su enfoque tradicional, sugiriendo un posible retorno al bateo de precisión. Por ahora, la liga enfrenta un desafío claro: revitalizar la ofensiva sin comprometer la evolución del juego. Los fanáticos, expectantes, esperan que el verano traiga más batazos y menos ponches.
