El 'Rey' Félix cumple su mejor salida de pretemporada
Lanzó pelota de dos imparables durante seis innings
Félix Hernández lanzó pelota de dos imparables durante seis innings, su faena más larga de la pretemporada, pero una parte del plantel de los Marineros de Seattle cayó el jueves 3-0 ante los Reales de Kansas City.
Hernández, el as que encabezó la Liga Americana con una efectividad de 2.14 la temporada anterior, aceptó una carrera, ponchó a cuatro bateadores y dio un boleto.
"El cambio de velocidad estuvo chévere, el slider bien y la recta increíble", dijo Hernández. "Logré que me conectaran muchos `rollings'. Eso fue bueno".
El manager Lloyd McClendon coincidió.
"Muy buena salida. Estábamos ansiosos por ver algo así", resaltó.
El "Rey Félix" retiró en orden a sus tres rivales en cuatro de los seis innings que conformaron su labor. Un doble del boricua Christian Colón, seguido por un lanzamiento descontrolado y un elevado de sacrificio de Jarrod Dyson en el tercer acto produjeron la única carrera de los Reales ante Hernández.
En lo que resta de la pretemporada, le queda una apertura a Hernández, antes de abrir el juego inaugural de la campaña. Finalizó la tarde haciendo algunos lanzamientos adicionales en el bullpen.
"Siento que estoy donde quiero estar", indicó, y se dijo ansioso de abrir el duelo en Seattle frente a la "Corte del Rey", su legión de seguidores que ocupan secciones enteras en el graderío del Safeco Field. "Va a ser divertido. Ha pasado mucho tiempo. Siento emoción pero estoy tranquilo".
Dodgers 9, Medias Blancas 6
GLENDALE - El cubano Yasiel Puig conectó otro cuadrangular, Jimmy Rollins sonó también un jonrón, y Clayton Kershaw ponchó a ocho contrincantes en seis episodios para que los Dodgers de Los Ángeles vencieran 9-6 a los Medias Blancas de Chicago.
Kershaw no mostró secuelas del percance sufrido en su salida previa contra Oakland, el viernes, cuando fue golpeado en el maxilar por un lineazo que le alcanzó a romper un diente.
El as toleró cuatro hits y una carrera. Dio un boleto y recetó al menos un ponche en cada inning en el que laboró.