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El PSV afronta el encuentro con una baja clave, la de Andrés Guardado. Tiene dañado el tobillo desde el choque frente al United y no se espera su regreso hasta octubre.
El PSV quiere repetir en Moscú la sensacional victoria que logró frente al Manchester United para encaminar la clasificación a los octavos de final. El CSKA es otro hueso duro de roer en casa, pero su entrenador, Leonid Slutsky, no quiere confiarse: "No me imagino que alguien pueda subestimar a un equipo que ha derrotado al lider de la Premier League".
"Esta competición es muy importante para nosotros y no logramos el resultado deseado frente al Wolfsburgo, será un partido muy interesante ante un equipo con muchos buenos jugadores, no solo Luuk De Jonk o Guardado", ha añadido Slutsky. No en vano, el conjunto ruso cayó en casa del Wolfsburgo por 1-0 en su inicio de Champions.
El PSV afronta el encuentro con una baja clave, la de Andrés Guardado. Tiene dañado el tobillo desde el choque frente al United y no se espera su regreso antes de principios de octubre. El objetivo es que esté disponible para el clásico holandés ante el Ajaz (4 de octubre).